Los exdiputados locales sí basificaron a sus allegados como trabajadores del Congreso local.
Pese a que en reiteradas ocasiones negaron que lo harían, y hasta criticaron el actuar de sus antecesores (la LXI Legislatura local) que dieron plaza a más de 30 empleados, los exlegisladores que en agosto pasado terminaron con su encargo para el que fueron electos también basificaron personal.
Por lo menos el espacio para tres personas en el área de administración y en el nivel 5 fueron autorizadas por el entonces presidente del Comité de Administración del Congreso local, Mariano González Aguirre.
Eso informó el hoy titular de ese órgano del Poder Legislativo, Rafael Ortega Blancas, quien no habló de despedirlos o darlos de baja, pero que sí ofreció, a nombre de la LXIII Legislatura local, no incurrir en la misma práctica, o por lo menos no mientras el presida ese Comité.
DEJARON DÉFICIT DE 17 MDP
El diputado emanado de las filas del partido Movimiento Regeneración Nacional habló también del déficit cercano a los 17 millones de pesos que los exdiputados locales dejaron.
Explicó que de lo presupuestado para el actual ejercicio fiscal (178 millones 500 mil pesos) un 33 % debía ser destinado para usarlo en los últimos cuatro meses de 2018, pero que, de los aproximadamente 59 millones de pesos que correspondía ejercer a la actual Legislatura solo les dejaron algo así como 42 millones 840 mil pesos, el 24 % de lo etiquetado en el Paquete Económico.
“Nos dejaron el 9 %, eso amén de que se quedaron con muchos pasivos”, remató.
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