A pesar de la influencia de las costumbres extranjeras, las escuelas de la entidad de los diferentes niveles educativos realizan diversas actividades con la finalidad de mantener viva la tradición del Día de Muertos, por lo que es común observar la realización de ofrendas a personajes ilustres del estado, algún compañero o docente fallecido o demás personas.
Y es que al menos para la Universidad Autónoma de Tlaxcala, este festejo se ha convertido en motivo de celebración de festivales que sirven para analizar obras literarias y abordar la temática de la muerte desde diferentes perspectivas, por lo que realizan el ya conocido Festival de la Muerte tiene Permiso, donde homenajean a literatos y estudian sus trabajos.
Para el caso de las escuelas de educación básica, los estudiantes realizan concursos de ofrendas, calaveritas y de disfraces, pero acordes a los personajes mexicanos como la catrina, de ahí que desde pequeños toman como suyas es acciones para transmitirlas de generación en generación.
Mención aparte tiene la escuela primaria indígena Maxixcatzin, ubicada en el Barrio de la Luz, en el municipio Contla, donde los padres de familia acuden con sus hijos a elaborar el pan de muerto en el horno tradicional que posee la institución y que normalmente es utilizado para mostrarles a los niños todo aquello que es usado por sus padres y abuelos desde hace muchos años.
Durante un recorrido realizado por este Diario, se pudo constatar que los docentes fomentan entre la comunidad estudiantil estas ricas tradiciones, pues los hacen partícipes de la elaboración de las ofrendas.
- La propia Secretaría de Educación Pública del Estado organiza un concurso estatal de ofrendas para despertar en los alumnos y público en general el interés por preservar estas tradiciones.
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