Nueve familiares del regidor de Españita, Óscar Ávila Portillo, fueron vinculados a proceso al declararse válidas las pruebas aportadas por las agresiones que sufrió Carolina Ramírez, su madre y una de sus tías el pasado 13 de octubre.
Se trata del representante popular señalado como autor intelectual de la brutal golpiza que recibió la exsecretaria del gobierno municipal porque ésta lo denunció meses antes por acoso sexual, situación que generó su despido del gobierno municipal por parte del alcalde Jesús González.
En audiencia de seguimiento a una Carpeta de Investigación, agentes del Ministerio Público de la Procuraduría General de Justicia del Estado lograron que el Juez de Control decretara vinculación a proceso en contra de Salomón N., Willy N., Árath N., Loreto N., Victoria N., Yatziri N., Nelly N., Erika N., y Virginia N., por el delito de lesiones calificadas, en agravio de tres mujeres.
La autoridad judicial valoró los argumentos aportados por los fiscales y, con base a ello, fijó como medida cautelar la prohibición de acerarse a las víctimas y concedió cuatro meses para el cierre de la investigación complementaria.
Respecto a los hechos que dieron origen a este proceso, el 13 de octubre, especialistas del Hospital General de la Secretaría de Salud de Calpulalpan informaron al Agente del Ministerio Público el ingreso de tres mujeres con diversas lesiones en el cuerpo.
- La historia
En mayo pasado, Carolina Ramírez, madre soltera de 27 años de edad, presentó una denuncia penal por acoso sexual en contra del regidor de Educación, Óscar Ávila Portillo, a quien señaló de acosarla sexualmente.
Desde entonces fue presionada para que retirara la denuncia, pero como no accedió fue despedida de su trabajo y, en presunta venganza, el pasado 13 de octubre personas identificadas como familiares del regidor la atacaron a golpes cuando caminaba junto con su mamá y su tía en la comunidad de La Magdalena Cuextotitla, perteneciente al municipio de Españita, por lo que fueron llevadas al Hospital General de Calpulalpan
De acuerdo con un vídeo grabado desde el hospital, en el que se le observó a Carolina severamente golpeada, el motivo de la golpiza fue la denuncia por acoso sexual que hizo en contra del servidor público, misma que se negó a retirar.
- La autoridad judicial valoró los argumentos aportados por los fiscales y, con base a ello, fijó como medida cautelar la prohibición de acerarse a las víctimas y concedió cuatro meses para el cierre de la investigación complementaria.