Guanajuato, Gto. En un predio del municipio de Juventino Rosas fueron localizados los restos óseos de cinco de las seis jóvenes desaparecidas en Celaya, así lo informó el fiscal del estado de Guanajuato, Carlos Zamarripa Aguirre.
El funcionario explicó que los restos fueron calcinados y mediante un perfil genético las cinco mujeres fueron plenamente identificadas. Todavía no se tiene información de la sexta víctima, pues la evidencia sigue en análisis.
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Aguirre añadió que durante diversos operativos en la zona por parte de los agentes de investigación criminal se logró la detención de seis personas, cinco originarias de Tamaulipas y uno de nacionalidad hondureña ligados a los hechos.
Los sujetos declararon “estar prestando servicio a un grupo criminal local que opera en la región Laja- Bajío” citó el fiscal. Ahora se encuentran recluidos en el penal y a la espera de la audiencia, con base al avance en las investigaciones.
Hasta ahora se informa de un total de 14 personas detenidas en torno al caso, sin que se especifique cuál fue su papel en los hechos.
Salieron a entregar servicio de banquetes
En torno a lo sucedido el día de la desaparición de Paulina Berenice Reséndiz, de 25 años; Mariana Gutiérrez, de 19; Sandra Daniela Paredes, de 24; Rosa María Pérez, de 42 y Gabriela Barbosa, de 48 y Yoselin Daniela Zamorano, de 20; habían salido a prestar su servicio de banquetes a una fiesta cerca del Álamo Country y de ahí sus familias no volvieron a saber de ellas.
El funcionario señaló que el último lugar de avistamiento lo dio a conocer una persona cercana a la carretera a Juventino Rosas. Por ello que se inició las investigaciones en lugares aledaños, así como operativos, sin embargo, se supo que las mujeres fueron interceptadas por sus captores en la glorieta del camino a la comunidad de San José de Guanajuato.
Las jóvenes fueron llevadas al predio fueron halladas días después sin vida, aunque aún se ignora si todavía estaban con vida cuando ocurrieron los hechos, pero las investigaciones indican que los criminales “quisieron desaparecer los cuerpos incinerándolos” puntualizo Carlos Zamarripa.
También señaló que en dicho predio fueron hallados varios restos óseos que podrían ser de otras personas desaparecidas de meses atrás, de igual manera calcinados. Dicha evidencia es revisada por personal de antropología forense y esquelética para poder identificar y tener la mayor información de estos posibles casos.
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En cinco cateos realizados en zonas aledañas se logró asegurar 23 armas largas y cortas, las cuales están relacionadas con diversas ejecuciones y de las cuales ya se están siendo integradas las carpetas correspondientes, ocho vehículos asegurados, miles de dosis de droga, 16 chalecos y cientos de cartuchos de diversos calibres y explosivos.
Las investigaciones aún continúan en estos casos, así como el proceso de entrega de los cuerpos a las familias.
Publicado en El Sol del Bajío
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