/ miércoles 31 de mayo de 2023

Resiliencia | Día Mundial sin Tabaco: Un llamado a un futuro sin humo

Hoy, 31 de mayo, se celebra en todo el mundo el Día Mundial sin Tabaco, una iniciativa global destinada a concienciar sobre los riesgos para la salud asociados con el consumo de tabaco y promover políticas de control del tabaco en todos los niveles.

En este día, organizaciones de salud, gobiernos, profesionales médicos y la sociedad civil se unen para destacar la importancia de adoptar un estilo de vida libre de humo. México también se une a la comunidad internacional en la lucha contra el consumo de tabaco. Esta iniciativa mundial tiene como objetivo concienciar sobre los peligros asociados con el tabaquismo y fomentar políticas efectivas de control del tabaco.

El consumo de tabaco es una de las principales causas evitables de enfermedad y muerte en todo el mundo. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), se estima que el tabaco causa más de 8 millones de muertes al año, y se prevé que esta cifra aumente si no se toman medidas adecuadas. Además de los daños a la salud individual, el tabaquismo también tiene un impacto significativo en la economía y el medio ambiente.

Este año, el lema del Día Mundial sin Tabaco es "Cultivemos alimentos, no tabaco". Se pone el foco en el cultivo para tratar de alentar a que los gobiernos no lo subvencionen y que se puedan utilizar esos recursos para cultivos más sostenibles que mejoren la seguridad alimentaria y la nutrición. El cultivo de tabaco tiene efectos negativos en la salud humana, en los agricultores y en el medio ambiente. Además, la industria tabacalera obstaculiza los esfuerzos para reemplazar el cultivo de tabaco atrapando a los agricultores en un ciclo de endeudamiento y dependencia ofreciéndoles incentivos, lo que agrava la crisis alimentaria a nivel global.

Cada año se destruyen unos 3,5 millones de hectáreas de tierra para cultivar tabaco, asignando extensas áreas de tierra fértil para su cultivo en lugar de utilizarlas para producir alimentos saludables. Esto tiene consecuencias económicas negativas para los países productores de tabaco, debido a los impactos sanitarios, ambientales y sociales derivados de su cultivo.

Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el tabaco provoca que se corten anualmente 600 millones de árboles, y además se requieren al menos 22 mil millones de litros de agua en el proceso y se emiten 84 millones de toneladas métricas de CO2 a la atmósfera, lo que contribuye a aumentar la temperatura del planeta y la destrucción de recursos naturales.

Se alienta a los fumadores a tomar conciencia de los peligros del tabaco y a buscar ayuda para dejar de fumar. La OMS alerta de que el tabaco es la principal causa de enfermedad, discapacidad y muerte prematura evitables en el mundo. El consumo de tabaco aumenta en un 70 % la probabilidad de una muerte prematura. Este incremento de riesgo está estrechamente ligado al tiempo que se ha fumado, la cantidad de cigarrillos consumidos diariamente, la intensidad de la inhalación del humo y el contenido de nicotina y alquitrán de la marca de tabaco utilizada, por lo que la OMS y otras organizaciones de salud ofrecen recursos y programas de apoyo para ayudar a las personas a superar su adicción al tabaco y mejorar su calidad de vida.

Además de enfocarse en los fumadores, el Día Mundial sin Tabaco también busca crear conciencia sobre la necesidad de políticas de control del tabaco más estrictas. Esto incluye la implementación de medidas como el aumento de los impuestos al tabaco, la prohibición de la publicidad y promoción del tabaco, la creación de espacios libres de humo y el acceso a servicios de cesación tabáquica.

El Día Mundial sin Tabaco nos recuerda la importancia de proteger nuestra salud y la de los demás al mantenernos libres de humo. Con cada vez más personas comprometidas a dejar de fumar y con el respaldo de políticas sólidas de control del tabaco, podemos trabajar juntos hacia un futuro sin tabaco y mejorar la salud y el bienestar de las generaciones venideras.

El consumo de tabaco es un problema de salud pública en México y en todo el mundo. Según datos de la Secretaría de Salud, en México se estima que hay 15 millones de fumadores, de los cuales, 684 mil (5%) son adolescentes de 12 a 17 años, expuestas a los riesgos para la salud relacionados con el tabaquismo, los efectos perjudiciales del tabaco van desde enfermedades respiratorias y cardiovasculares hasta diversos tipos de cáncer.

El gobierno mexicano ha implementado políticas de control del tabaco para proteger la salud de la población. Comprometiéndose a implementar una serie de medidas para reducir la prevalencia del tabaquismo en el país. Estas medidas incluyen la prohibición de fumar en espacios públicos cerrados y abiertos, la advertencia gráfica en los paquetes de cigarrillos, el aumento de los impuestos al tabaco y la restricción de la publicidad y promoción del tabaco.

El Día Mundial sin Tabaco es una oportunidad para hacer un llamado a un futuro libre de humo y fortalecer los esfuerzos conjuntos en la lucha contra el tabaquismo, con una combinación de políticas de control del tabaco sólidas, programas de cesación tabáquica efectivos y una mayor conciencia pública, con ello se puede lograr una reducción significativa en el consumo de tabaco y mejorar la salud y el bienestar de las personas.

Hoy, 31 de mayo, se celebra en todo el mundo el Día Mundial sin Tabaco, una iniciativa global destinada a concienciar sobre los riesgos para la salud asociados con el consumo de tabaco y promover políticas de control del tabaco en todos los niveles.

En este día, organizaciones de salud, gobiernos, profesionales médicos y la sociedad civil se unen para destacar la importancia de adoptar un estilo de vida libre de humo. México también se une a la comunidad internacional en la lucha contra el consumo de tabaco. Esta iniciativa mundial tiene como objetivo concienciar sobre los peligros asociados con el tabaquismo y fomentar políticas efectivas de control del tabaco.

El consumo de tabaco es una de las principales causas evitables de enfermedad y muerte en todo el mundo. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), se estima que el tabaco causa más de 8 millones de muertes al año, y se prevé que esta cifra aumente si no se toman medidas adecuadas. Además de los daños a la salud individual, el tabaquismo también tiene un impacto significativo en la economía y el medio ambiente.

Este año, el lema del Día Mundial sin Tabaco es "Cultivemos alimentos, no tabaco". Se pone el foco en el cultivo para tratar de alentar a que los gobiernos no lo subvencionen y que se puedan utilizar esos recursos para cultivos más sostenibles que mejoren la seguridad alimentaria y la nutrición. El cultivo de tabaco tiene efectos negativos en la salud humana, en los agricultores y en el medio ambiente. Además, la industria tabacalera obstaculiza los esfuerzos para reemplazar el cultivo de tabaco atrapando a los agricultores en un ciclo de endeudamiento y dependencia ofreciéndoles incentivos, lo que agrava la crisis alimentaria a nivel global.

Cada año se destruyen unos 3,5 millones de hectáreas de tierra para cultivar tabaco, asignando extensas áreas de tierra fértil para su cultivo en lugar de utilizarlas para producir alimentos saludables. Esto tiene consecuencias económicas negativas para los países productores de tabaco, debido a los impactos sanitarios, ambientales y sociales derivados de su cultivo.

Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el tabaco provoca que se corten anualmente 600 millones de árboles, y además se requieren al menos 22 mil millones de litros de agua en el proceso y se emiten 84 millones de toneladas métricas de CO2 a la atmósfera, lo que contribuye a aumentar la temperatura del planeta y la destrucción de recursos naturales.

Se alienta a los fumadores a tomar conciencia de los peligros del tabaco y a buscar ayuda para dejar de fumar. La OMS alerta de que el tabaco es la principal causa de enfermedad, discapacidad y muerte prematura evitables en el mundo. El consumo de tabaco aumenta en un 70 % la probabilidad de una muerte prematura. Este incremento de riesgo está estrechamente ligado al tiempo que se ha fumado, la cantidad de cigarrillos consumidos diariamente, la intensidad de la inhalación del humo y el contenido de nicotina y alquitrán de la marca de tabaco utilizada, por lo que la OMS y otras organizaciones de salud ofrecen recursos y programas de apoyo para ayudar a las personas a superar su adicción al tabaco y mejorar su calidad de vida.

Además de enfocarse en los fumadores, el Día Mundial sin Tabaco también busca crear conciencia sobre la necesidad de políticas de control del tabaco más estrictas. Esto incluye la implementación de medidas como el aumento de los impuestos al tabaco, la prohibición de la publicidad y promoción del tabaco, la creación de espacios libres de humo y el acceso a servicios de cesación tabáquica.

El Día Mundial sin Tabaco nos recuerda la importancia de proteger nuestra salud y la de los demás al mantenernos libres de humo. Con cada vez más personas comprometidas a dejar de fumar y con el respaldo de políticas sólidas de control del tabaco, podemos trabajar juntos hacia un futuro sin tabaco y mejorar la salud y el bienestar de las generaciones venideras.

El consumo de tabaco es un problema de salud pública en México y en todo el mundo. Según datos de la Secretaría de Salud, en México se estima que hay 15 millones de fumadores, de los cuales, 684 mil (5%) son adolescentes de 12 a 17 años, expuestas a los riesgos para la salud relacionados con el tabaquismo, los efectos perjudiciales del tabaco van desde enfermedades respiratorias y cardiovasculares hasta diversos tipos de cáncer.

El gobierno mexicano ha implementado políticas de control del tabaco para proteger la salud de la población. Comprometiéndose a implementar una serie de medidas para reducir la prevalencia del tabaquismo en el país. Estas medidas incluyen la prohibición de fumar en espacios públicos cerrados y abiertos, la advertencia gráfica en los paquetes de cigarrillos, el aumento de los impuestos al tabaco y la restricción de la publicidad y promoción del tabaco.

El Día Mundial sin Tabaco es una oportunidad para hacer un llamado a un futuro libre de humo y fortalecer los esfuerzos conjuntos en la lucha contra el tabaquismo, con una combinación de políticas de control del tabaco sólidas, programas de cesación tabáquica efectivos y una mayor conciencia pública, con ello se puede lograr una reducción significativa en el consumo de tabaco y mejorar la salud y el bienestar de las personas.