Artistas Oscuros | Rembrandt fusionó lo corpóreo y lo espiritual

Después de tener fama y fortuna, el artista murió el olvido debido al rechazo de la época por sus pinturas enfocadas a lo etéreo del ser humano

Karla González | El Sol de Tlaxcala

  · viernes 24 de julio de 2020

Rembrandt es considerado uno de los genios de la técnica del claroscuro debido al manejo de la luz en sus pinturas/ESPECIAL HISTORIAARTE.COM

El artista holandés Rembrandt Harmenszoon van Rijn, quien es considerado como al maestro del Barroco, fue uno de aquellos genios cuya inspiración surgía de su lado más melancólico y oscuro, lo que le permitió la creación de obras que en su tiempo desafiaron los cánones estéticos de su tiempo.

En 1642, Rembrandt sufrió la pérdida de su esposa Saskia hecho que marcaría un profundo cambio tanto en su personalidad como en su obra, que hasta ese momento gozaba de gran aceptación entre la aristocracia holandesa, por su magnífico manejo de la luz y los claroscuros, influenciado por el maestro del tenebrismo, Caravaggio.

Luego de la muerte de Saskia, el artista escandalizó a la sociedad holandesa por sus relaciones amorosas con la niñera y el ama de llaves, lo que resultó en el alejamiento de Rembrandt de la vida pública, además de que el artista nunca pudo contraer nupcias nuevamente debido a una cláusula estipulada en su contrato matrimonial, que fue un requisito para poder heredar la fortuna de su difunta esposa.

Especialistas en arte coinciden en que la obra tardía del pintor refleja una profunda sensibilidad, pues buscaba plasmar el alma de los personajes; es así que, al igual que Caravaggio, comenzó a pintar a personajes bíblicos bajo un aire terrenal, lo cual causó un descontento entre sus seguidores quienes no esperaban menos que retratos que mostraran “lo divino” en aquello en lo que creían.

Debido a la pérdida de popularidad, el artista comenzó a tener graves problemas financieros y terminó viviendo en un modesto apartamento, muy alejado de la opulencia y excentricidades a las que estaba acostumbrado en sus años de mayor esplendor.

A sus 54 años, Rembrandt se encontraba en bancarrota y con una carrera artística arruinada; pese a todo ello vinieron obras emblemáticas que actualmente son consideradas obras maestras, pues presentan una ruptura del artista con su época por centrarse en la fusión entre lo corpóreo y lo espiritual, como lo refleja en “El retorno del hijo pródigo”, que data del año 1669.

  • Rembrandt murió en la pobreza el 4 de octubre de 1669, tan solo un año después de la muerte de su primogénito Titus

No dejes de leer: