El artista visual y artesano textil, originario del municipio de Contla de Juan Cuamatzi, Ignacio Netzahualcoyotl hizo un llamado a la unión entre autoridades estatales, municipales y artesanos de la entidad para lograr la denominación de origen del sarape de saltillo, con la finalidad de que Tlaxcala sea reconocido como el lugar donde surgió esta prenda.
La denominación de origen es un mecanismo de protección que otorga el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial a los productos que son elaborados a partir de métodos tradicionales en zonas geográficas específicas y que cuentan con elementos culturales e históricos que los diferencian de otros.
Al respecto, Ignacio Netzahualcoyotl afirmó que la denominación de origen es necesaria para evitar casos de plagio, como el ocurrido recientemente por la casa de moda Carolina Herrrera, que para su colección “Resort 2020” utilizó diseños de la iconografía textil de México, entre ellos del sarape de saltillo.
EL SALTILLO SURGIÓ EN TLAXCALA, AFIRMA
“Existe una inconformidad por quienes elaboramos esta prenda, porque es una especie de despojo moral y cultural de un pueblo. En Contla y en Chiautempan se sigue elaborando hasta nuestros días el sarape de saltillo, que es un referente mexicano; sin embargo, en el imaginario colectivo no se ha reconocido que el origen del sarape corresponde a Tlaxcala y no a Coahuila”, enfatizó el artista.
Ignacio, quien es un activista de la preservación del arte textil en la entidad y que por su trabajo ha recibido reconocimientos como el de Grandes Maestros del Arte Popular Mexicano, primer lugar del Galardón Nacional de Arte Popular y el nombramiento de Leyenda Viviente del Arte Popular, enfatizó que de acuerdo con registros documentales fue en Tlaxcala donde se produjeron por primera vez estos sarapes, de ahí la necesidad de contar con un mecanismo legal como la denominación de origen que proteja a los artesanos de los casos de plagio.
“Con la llegada de los españoles se introdujo en el territorio tlaxcalteca el telar para la confección textil, y se implementaron nuevas técnicas que consistían en pequeños saltos en los pedales de esta herramienta, de ahí el nombre de saltillo. Posteriormente, con la migración de tlaxcaltecas al norte del país, en el hecho histórico conocido como la salida de las 400 familias, los tejedores de Tlaxcala enseñaron las técnicas para la creación del sarape de saltillo a los artesanos de Coahuila”, abundó.
EL CASO Carolina Herrera
Por otra parte, el artista Ignacio Netzahualcoyotl expuso que a pesar de tratarse de una apropiación cultural, hecho por el cual incluso la Secretaría de Cultura pediría una explicación a la casa de moda Carolina Herrera, esta situación colocó al sarape de saltillo en escenarios internacionales, lo cual los artesanos podrían utilizar de forma positiva.
“Veamos el lado positivo, y es que al estar en boca de todos, en la gente crece la curiosidad de saber de dónde proviene esta pieza y dónde se puede adquirir, por eso es importante contar con la denominación de origen y que a nivel mundial se sepa que el sarape de saltillo inició en Tlaxcala y que a la fecha se sigue elaborando. Ya el año pasado el Congreso del Estado declaró a este pieza como patrimonio cultural, sin embargo vemos que también es necesaria la denominación de origen”, resaltó.
- La denominación de origen permite a un producto reconocimiento a nivel mundial y derechos exclusivos de producción y se brinda a los productores, o en este caso artesanos, la protección contra falsificaciones.
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