El año viejo se ha ido, los propósitos para el año nuevo están vigentes, la celebración del recibimiento de un nuevo año se ha terminado o en algunos casos sigue para algunas familias, todo fue y es celebración, sin importar el impacto negativo al medio ambiente.
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Fue una madrugada fría la de este lunes del año 2024 en Contla de Juan Cuamatzi y demás municipios del estado, pero eso no importó para salir a las calles a tronar cohetes, prender fogatas y brindar.
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El calor de las hogueras fue suficiente para un ambiente cálido en el seno familiar, con los amigos o vecinos, que contrastó con las bebidas embriagantes acompañadas con hielo o refresco frío.
La cena fue lo de menos, el convivió fue lo más significativo para los adultos alrededor del fuego de leña, mientras que infantes y jóvenes se divirtieron con material pirotécnico.
Después de los primeros segundos del nuevo año, siguieron los abrazos, los deseos, y por los aires se esparcía el retumbado de los explosivos, desde una pequeña “palomita” hasta un “cañón”.
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Aún al amanecer, el sonido del tronido de los cohetes siguió en algunas zonas del municipio, donde el recibimiento al año nuevo perdura.
Incluso, durante un recorrido realizado durante el amanecer del año nuevo por El Sol de Tlaxcala en avenidas de Contla de Juan Cuamatzi, algunas familias siguen el festejo en las calles, con música, baile y alcohol.
TRISTE REALIDAD
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Después de la primera luz del día, poco después de las 06:30 horas, la realidad fue el impacto negativo al medio ambiente, calles llenas de basura de los cohetes quemados, que a muchos metros de distancia, el olfato nos reporta la polución que generó la mezcla de nitratos, sulfatos y percloratos en fórmulas de sodio, cobre, estroncio, litio, antimonio, magnesio y aluminio, materiales que se utilizan para su elaboración.
Y es que según la organización no gubernamental ambientalista internacional Greenpeace, ya en los aires, esa mezcla libera, entre otros, monóxido de carbono y partículas suspendidas y, junto con las emisiones del transporte, fábricas, fogatas, calentones y quema de llantas o basura, genera alta contaminación, escasa visibilidad y sensación de neblina.
Lo malo, que la mayoría de esa basura se esparcirá por todos lados y terminará en las barrancas y alcantarillas.
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CONTRASTE
Pocos, pero responsables, ciudadanos de Contla salieron a barrer el frente de su casa, como habitualmente lo hacen, empero, horas más tardes, el aire esparcirá la basura de otras zonas y volverá invadir el frente de su inmueble.