Luego de 16 días hospitalizado, el torero apizaquense José Alberto Ortega García finalmente fue dado de alta del Hospital Puebla para continuar su recuperación en casa.
Fue a las 14:30 horas de este lunes 26 de febrero que salió de la clínica acompañado de sus padres y su primo Othón Ortega, con quien posó en su primera fotografía fuera de la sala poblana.
EL REPORTE MÉDICO
En días pasados se dio a conocer que aun con el éxito obtenido en la cirugía del oído derecho, el pronóstico auditivo y de movilidad era incierto y así se mantiene.
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El último reporte médico emitido explica que será en los próximos días cuando el especialista maxilofacial Agustín Monroy se haga cargo de la última operación de rostro, una vez que la zona afectada se encuentre en condiciones de ser intervenida.
Con esta cirugía se espera reparar los daños en el arco cigomático que se fracturó por la cornada del toro “Cigarrero” el pasado 10 de febrero en la Corrida del Carnaval, celebrada en la plaza de toros Jorge “El Ranchero” Aguilar.
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Por lo pronto, el matador mantendrá continuas revisiones médicas en el Hospital Puebla que confirmen su positiva evolución.
Cabe recordar que fue en este sitio donde se intervino en dos ocasiones: primero por el doctor Fausto Álvarez, el neurocirujano que lo atendió de la fractura en la base del cráneo, donde tenía esquirlas de hueso y, posteriormente, el médico otorrinolaringólogo Luis Alberto Sánchez, que lo operó del daño sufrido en el oído.
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Hasta este momento los expertos no han querido emitir un pronóstico de las posibles secuelas del percance en la salud de Alberto; no obstante todos coinciden con que lo más importante es que su vida está a salvo y hoy dormirá en su casa de Apizaco.