Las tradicionales viseras infantiles hechas de foami con figura de animales, y que eran vendidas en los costados del acceso al Zoológico del Altiplano, pasaron a una obligada “hibernación”, debido al cierre temporal del atractivo que estará en rehabilitación y remodelación hasta finales de diciembre.
De esta forma, el sustento de 40 familias, casi todas de la comunidad de San Damián Tlacocalpan, municipio de Amaxac de Guerrero, quedó afectado.
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Y es que en ese lugar, de los mil 115 habitantes, el 60 por ciento se dedica al comercio en ferias, fiestas patronales y todo tipo de eventos tanto a nivel estatal como nacional. Ahí, literalmente el comercio exterior moviliza la economía del pueblo.
Ahora, un grupo de esa comunidad quedó en desamparo, la mayoría mujeres, debido a que durante dos meses no podrán ofrecer sus productos a los visitantes locales y foráneos. Empero, no bajan los brazos y su espíritu emprendedor las hizo cambiar de giro, dejaron por un tiempo las manualidades de foami por la elaboración de piñatas para la época navideña.
Otras buscarán alternativas en las festividades de los pueblos con parte de la mercancía que ofertan en el zoológico, como lentes y sombreros, además de otros artículos de novedad que son adquiridos en la Ciudad de México.
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PAGAN SU DERECHO DE PISO
Las comerciantes, algunas con más de 20 años de trabajar en el exterior del Zoológico del Altiplano, indicaron que pese a la informalidad, pagan su derecho de piso anual al municipio de Apetatitlán de Antonio Carvajal.
Además, la buena disposición de los directivos del zoológico, así como de las diferentes autoridades estatales anteriores y actuales, han podido organizarse para consolidar una fuente de ingresos.
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Así, Emma Corona Pérez, comerciante de figuras de foami y ahora emprendedora en el ramo de las piñatas, informó que todas sus compañeras tienen confianza que después de la rehabilitación y remodelación del inmueble turístico, regresen a la actividad en el mismo lugar.
Asimismo, Norma N., quien también almacenó su mercancía de viseras, detalló que el comercio es un noble oficio que no abandona económicamente a las familias, que igual que Emma Corona busca otras alternativas para subsistir.
DE RAÍCES COMERCIANTES
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Por su parte, Melchidec Juárez Corona, presidenta de comunidad de San Damián Tlacocalpan, dijo sentirse orgullosa de sus raíces comerciantes, pero más por el tesón que ponen sus vecinos para salir adelante. “Aquí tenemos gente que toda su vida se ha dedicado al comercio, que ha viajado por muchas partes de la República, que ha vivido diferentes vicisitudes en su andanza, como dormir en cartones, soportar fríos y lluvias… pero siempre con la cabeza en alto y sacar adelante a su familia”, finalizó.
- Las viseras de foami son manualidades que elaboran las mujeres comerciantes de San Damián Tlacocalpan, también elaboran el famoso changuito bailarín.
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