Ante el dolor que pervive en los corazones de las personas del pueblo de Nativitas, por la explosión de cohetones que dejó muertes en Jesús Tepactepec, el obispo de Tlaxcala, Julio César Salcedo Aquino, pidió armonía, unidad y reconciliación entre las familias.
A unos metros de la tragedia donde fallecieron hombres y niños, expresó: “vengo a darles ánimo, que recuperen la paz, que sanen sus heridas de tanto dolor, que valoren la vida y que Jesús sea misericordioso con este pueblo trabajador
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Ante jóvenes que aquel 15 de marzo de 2013 vivieron -siendo niños- la explosión, les pidió que amen a Dios.
Al cumplirse 11 años, -mismo día 15 de marzo, el Quinto Viernes de Cuaresma- también pidió a la población que se prepare para el año jubilar que en 2025 cumplirá un siglo.
Ante más de mil feligreses, Salcedo Aquino aprovechó para difundir a través de una imagen la historia de los Tres Niños Mártires de Tlaxcala que fueron canonizados hace nueve años.
Desde la capilla de Jesús de los Tres Caminos Salcedo Aquino fue llevado hasta la parroquia de Jesús.
Lo acompañaron fiscales de la Virgen de la Natividad y autoridades municipales encabezadas por Carlos García Sampedro.
La monumental banda de Música Texcoco con 40 integrantes acompañó al religioso, entonando melodías ya que ahora se celebra con música esta fecha.
EL RECUERDO DE NIÑO
“Hace once años hubo lluvia y las mechas (de los cohetes) no querían prender, ahora hay lluvia, pero de ceniza, son cosas de Dios”, expresó Juan N., quien aquel fatídico día tenía sólo 12 años. Él quedó con el rostro desfigurado.
Luego, una voz femenina reconoció la deferencia que hizo el obispo de Tlaxcala, Julio César Salcedo en oficiar la misa en Jesús Tepactepec.
“Gracias señor Obispo por orar para que sanen nuestras heridas de ese hecho que cambió la vida para siempre de muchas familias de Nativitas y otros lugares”, expresó.
Y pidió un minuto de aplausos a los padres e hijos que esta vez llegaron con flores.
LAS OCHO TUMBAS EN NATIVITAS
- “Abuelo, es la tumba de mi abuelita”.
-“Sí hijo”, respondió José tras depositar un ramo de flores a cada uno de sus hermanos Reyes y Eugenio quienes fallecieron semanas después de la explosión de cohetes, el 15 de marzo de 2013 en Jesús Tepactepec.
Ayer viernes José y sus nietos participaron en la procesión que comenzó en el panteón municipal de Nativitas y terminó atrás de la capilla de Jesús de los Tres Caminos.
El dolor se percibe a once años de la tragedia, José respira para platicar a este Diario la pena que no ha podido borrar de su mente. “A Reyes lo iban a mutilar, tenía la pierna derecha destrozada por las quemaduras, fue el primero que murió en mayo de 2013, había pasado un día del Santo Rosario, cuando nos enteramos que Eugenio, mi otro hermano quien tenía 20 varas (de cohetones) en todo el cuerpo, falleció de un infarto”, explicó a este Diario.
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Comentó que desde entonces le ha tocado sepultar a su madre y otros cinco hermanos quienes no han podido soportar la tragedia.
“Aquí están sepultados siete hermanos y madre; Elena fue la última hermana en irse, por ver tanta tristeza y sentir dolor y sufrimiento”, lamentó.
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Dijo que solo se quedó con un hermano. “Les dije a mis nietos, vengan conmigo con las flores solo venimos una vez al año al panteón para dejar un par de ramos a mis hermanos que murieron en la explosión de Jesusito”, puntualizó.
Oscar Murias quien vio convalecer a su padre durante meses, dijo que cuatro familiares resultaron quemados, uno de ellos falleció.
- En Tepactepec persiste el dolor por las 25 personas fallecidas en la explosión.
- Ayer viernes no hubo un solo cohetón detonado en la comunidad.
- 25 personas murieron por la explosión de cohetes el 15 de marzo de 2013
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- 154 personas quedaron con heridas de diferentes magnitudes
- La monumental banda de Música Texcoco con 40 integrantes ambientó el lugar.
Julio César Salcedo Aquino, Obispo de Tlaxcala
Vengo a darles ánimo, que recuperen la paz, que sanen sus heridas de tanto dolor, que valoren la vida y que Jesús sea misericordioso con este pueblo trabajador”