Francisco Díaz Herrera, asignado a la Vicaría Territorial de San Pedro Tlalcuapan y Muñoztla, ofició una misa de cuerpo presente el pasado fin de semana, la cual –según testimonios- reunió poco más de 25 personas.
Al momento se desconoce dónde contrajo el virus el presbítero, pero se encuentra aislado del contacto de su comunidad y permanece en su casa bajo supervisión de la Secretaría de Salud de Tlaxcala.
El Sol de Tlaxcala acudió este domingo 31 de mayo a ambas comunidades de Chiautempan y constató que las iglesias en honor a San Pedro permanecen cerradas.
Los porteros del templo de Muñoztla mencionaron a este Diario que hoy estaba programada una celebración por el Día del Chofer, pero fue suspendida para evitar que el virus se propague entre la feligresía.
Aunado a ello, la pareja a cargo del recinto religioso dijo que en semanas pasadas hubo misas que ofreció el sacerdote Francisco Díaz, en su mayoría para fiestas particulares o de cuerpo presente.
Por su parte, habitantes de Tlalcuapan aseguraron que la iglesia de su demarcación lleva casi dos meses cerrada; el motivo, por la contingencia sanitaria.
Hace tres días (28 de mayo), la Diócesis de Tlaxcala comunicó que el sacerdote Francisco Díaz Herrera dio positivo a la prueba de Covid-19; se trata del primer caso de un sacerdote contagiado en la entidad.
La información fue difundida por la Diócesis a través de su cuenta de Facebook, donde también detalló que sigue en tratamiento y se encuentra estable de salud.
“Gracias a Dios se encuentra estable, pero no podrá atender servicios religiosos en San Pedro Tlalcuapan y San Pedro Muñoztla, comunidades confiadas a su cuidado pastoral, a las cuales agradecemos su solidaridad y su oración”, dice el documento.
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