Rescatistas tlaxcaltecas se movilizaron de inmediato la noche de este domingo en asistencia de cuerpos de emergencia de Hidalgo para atender una cadena de al menos tres explosiones en una empresa gasera ubicada en la comunidad de Chimalpa Tlalayote, municipio de Apan y en los límites con Calpulalpan.
El estruendo provocó pánico entre los habitantes, pero una vez que la situación fue controlada, se corroboró que por fortuna no hubo personas fallecidas ni heridas, pero sí innumerables daños materiales.
El titular de la Coordinación Estatal de Protección Civil (CEPC), José Antonio Ramírez Hernández, indicó que la primera explosión se registró pasadas las 19:00 horas, lo que alertó a pobladores tanto de Apan y Emiliano Zapata, Hidalgo, así como de Calpulalpan, Tlaxcala, al cimbrarse sus viviendas y notarse una enorme nube de humo.
Al recibir decenas de reportes al Servicio de Emergencias 911, de inmediato fue implementado un operativo coordinado entre ambas entidades y a los pocos minutos arribaron elementos de los cuerpos de bomberos, Protección Civil, Cruz Roja, Policía Municipal, Policía Estatal y Guardia Nacional.
Bomberos procedieron al trabajo de enfriamiento en el depósito principal, mientras que paramédicos marcaron un perímetro a través de un amplio acordonamiento de tres kilómetros, además del cierre de la carretera Calpulalpan-Apan y Calpulalpan-Emiliano Zapata.
José Antonio Ramírez refirió que la gasera se encuentra en una zona deshabitada y de manera preventiva los ocupantes de escasas viviendas cercanas fueron desalojados, además de que se alistó un salón social como posible albergue, pero al final no fue requerido su uso.
“Al recibir muchos reportes de lo ocurrido de inmediato nos pusimos en contacto con Enrique Padilla, director de Protección Civil y Gestión de Riesgos de Hidalgo para brindar todo el apoyo con bomberos, paramédicos y personal policiaco… por fortuna la situación fue controlada y no hubo pérdidas humanas que lamentar”, expresó José Antonio Ramírez al destacar la labor interestatal en la atención de la emergencia química tipo explosión e incendio.
Alrededor de las 20:30 horas la situación fue controlada y, una vez descartado cualquier riesgo, se levantó el puesto de mando de ambulancias para cualquier atención médica, aunque las labores de enfriamiento de los autotanques de gas L.P. siniestrados continuaron.
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