TAPACHULA. El Instituto Nacional de Migración (INM) realizó la madrugada de ayer redadas en hoteles y viviendas de Tapachula, Chiapas, así como en los alrededores de las oficinas de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar). Los migrantes acusaron que esos operativos fueron ilegales y que mantienen su plan de salir en caravana masiva el próximo lunes.
De acuerdo con los migrantes, los operativos que realizó el INM en las diferentes viviendas que rentan los extranjeros en la ciudad fueron de forma ilegal, ya que los agentes no les presentaron una orden de un juez para ingresar a los hogares, además de que no les respetaron sus visas humanitarias y documentos que les dio la Comar para poder circular en la ciudad mientras realizan sus trámites.
Por su parte, agentes del INM respondieron a los migrantes que ellos cuentan con la facultad de hacer las redadas.
Las autoridades también recorrieron las oficinas de la Comar para llevarse a quienes se quedaban en ese lugar haciendo fila para realizar sus trámites.
Los operativos de migración se llevaron a cabo luego de que se rompió el acuerdo que tenían las autoridades con los migrantes de entregarles autobuses para ser trasladados a otras ciudades para que no salieran en caravana de la ciudad.
Durante los operativos, el INM aseguró a 50 extranjeros de diferentes nacionalidades y los trasladó a la estación migratoria Siglo XXI.
Representantes de los migrantes esperan que los operativos se intensifiquen, ya que presuntamente buscan inculcar miedo y evitar que la caravana salga de Tapachula el lunes.
Diario del Sur buscó al INM para obtener información sobre los operativos realizados por los agentes federales, sin embargo, al cierre de edición no se obtuvo una respuesta.
Ayer por la tarde, el contingente de extranjeros se reunió por última vez en el parque Bicentenario para acordar los detalles de su salida hacia la frontera norte de México.
Anunciaron que planean caminar por 12 horas diarias para llegar a su destino.
Al frente del contingente irán niñas, niños, personas con capacidades diferentes y adultos mayores, seguidos por mujeres, y al final los hombres, para evitar que los últimos sean asegurados por la autoridad migratoria.
Se estima que la caravana está conformada por 11 mil personas de distintas nacionalidades, principalmente de origen venezolano, ya que según las listas en las que están anotados, nueve mil son de ese país sudamericano.
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También acordaron que el primer punto de descanso será el ejido Álvaro Obregón, a 14 kilómetros de distancia de Tapachula, lugar en donde les han dado camiones a las caravanas que han salido este año, informaron.
Los migrantes aseguraron que la caravana irá de forma pacífica sin buscar confrontación con las autoridades del INM y de la Guardia Nacional, pero advirtieron que no permitirán ser detenidos. Se espera que sea la caravana más grande que haya salido de Tapachula debido al número de personas que podrían participar.
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