/ miércoles 22 de marzo de 2023

Resiliencia | Acoso/violencia escolar

En los últimos días se ha reportado un aumento en los casos de violencia escolar en distintas partes del país, la semana pasada, en el Estado de México la muerte de Norma Lizbeth derivado de las consecuencias después de haber recibido días antes una golpiza por su buleadora, quien era su compañera de clases; aquí en Tlaxcala un estudiante agredió físicamente a otro compañero afuera de su escuela. Ambos incidentes, como otros muchos más, fueron captados en video por varios testigos y ha sido ampliamente difundido en redes sociales.

En México, la práctica del acoso o violencia escolar ha tenido graves consecuencias, desde la desaparición de personas hasta provocar el suicidio, los niños y niñas expuestos a la violencia en las escuelas tiene efectos negativos en su salud física, sufren daños físicos y trastornos psicológicos que afectan su bienestar emocional y tener efectos negativos a largo plazo, se dificulta su aprendizaje al no tener un adecuado rendimiento académico y dar lugar a la deserción escolar, entre otros.

Algunos ejemplos de violencia escolar entre ellos se incluyen golpear, patear, pellizcar, escupir, hacer tropezar, empujar, tomar, romper o esconder sus cosas, hacer gestos desagradables o inadecuados con la cara o las manos, avergonzar, etc.

La violencia entre menores puede tener varias causas, algunas de las cuales incluyen:

  • Entorno familiar: Un entorno familiar disfuncional puede ser una causa importante de la violencia entre menores. Si los niños están expuestos a la violencia en el hogar o a un ambiente hostil, pueden ser más propensos a actuar de manera violenta.
  • Experiencias traumáticas: Los niños que han sufrido traumas, como el abuso o la negligencia, pueden ser más propensos a ser violentos.
  • Influencias externas: La exposición a la violencia en los medios de comunicación, videojuegos violentos y la falta de supervisión parental también puede contribuir a la violencia entre menores.
  • Problemas de conducta: Los niños con problemas de conducta, como el trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) o el trastorno de conducta, pueden ser más propensos a ser violentos.

Es importante recordar que cada caso de violencia es único y puede tener causas múltiples y complejas, para abordar el problema de la violencia entre estudiantes, es necesario abordar las causas subyacentes y trabajar con los niños y sus familias para prevenir futuros comportamientos violentos.

Tenemos tantos y tantos casos donde varios estudiantes ya sean niños, niñas y jóvenes han sido acusados de intimidar y acosar a compañeras y compañeros tanto menores de edad como de todas las edades, incluso muchos padres han denunciado ante las autoridades escolares, quienes en muy pocas ocasiones han iniciado una investigación para determinar responsabilidades.

Estos incidentes deben generar una gran preocupación a toda la sociedad, en particular a padres de familia, maestros y autoridades educativas, quienes deben de actuar para tomar medidas y prevenir la violencia o acoso escolar y garantizar la seguridad de los estudiantes, a través de medidas o propuestas que incluyan la implementación de programas de prevención y manejo de conflictos, es muy importante la capacitación de maestros y alumnos en habilidades sociales y emocionales, y la promoción de una cultura de respeto y tolerancia en las escuelas.

Sabías que en México, dos de cada 10 estudiantes han sido víctimas de algún tipo de acoso escolar, y la mayoría de ellos está de acuerdo en que esta situación impacta en algún nivel su desempeño escolar.

Es importante recordar que la violencia o acoso escolar no solo afecta a las víctimas directas, sino que también tiene consecuencias negativas para el bienestar emocional y académico de toda la comunidad escolar, por ello, es necesario tomar en serio este problema y trabajar juntos para prevenirlo y abordarlo de manera efectiva.


En los últimos días se ha reportado un aumento en los casos de violencia escolar en distintas partes del país, la semana pasada, en el Estado de México la muerte de Norma Lizbeth derivado de las consecuencias después de haber recibido días antes una golpiza por su buleadora, quien era su compañera de clases; aquí en Tlaxcala un estudiante agredió físicamente a otro compañero afuera de su escuela. Ambos incidentes, como otros muchos más, fueron captados en video por varios testigos y ha sido ampliamente difundido en redes sociales.

En México, la práctica del acoso o violencia escolar ha tenido graves consecuencias, desde la desaparición de personas hasta provocar el suicidio, los niños y niñas expuestos a la violencia en las escuelas tiene efectos negativos en su salud física, sufren daños físicos y trastornos psicológicos que afectan su bienestar emocional y tener efectos negativos a largo plazo, se dificulta su aprendizaje al no tener un adecuado rendimiento académico y dar lugar a la deserción escolar, entre otros.

Algunos ejemplos de violencia escolar entre ellos se incluyen golpear, patear, pellizcar, escupir, hacer tropezar, empujar, tomar, romper o esconder sus cosas, hacer gestos desagradables o inadecuados con la cara o las manos, avergonzar, etc.

La violencia entre menores puede tener varias causas, algunas de las cuales incluyen:

  • Entorno familiar: Un entorno familiar disfuncional puede ser una causa importante de la violencia entre menores. Si los niños están expuestos a la violencia en el hogar o a un ambiente hostil, pueden ser más propensos a actuar de manera violenta.
  • Experiencias traumáticas: Los niños que han sufrido traumas, como el abuso o la negligencia, pueden ser más propensos a ser violentos.
  • Influencias externas: La exposición a la violencia en los medios de comunicación, videojuegos violentos y la falta de supervisión parental también puede contribuir a la violencia entre menores.
  • Problemas de conducta: Los niños con problemas de conducta, como el trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) o el trastorno de conducta, pueden ser más propensos a ser violentos.

Es importante recordar que cada caso de violencia es único y puede tener causas múltiples y complejas, para abordar el problema de la violencia entre estudiantes, es necesario abordar las causas subyacentes y trabajar con los niños y sus familias para prevenir futuros comportamientos violentos.

Tenemos tantos y tantos casos donde varios estudiantes ya sean niños, niñas y jóvenes han sido acusados de intimidar y acosar a compañeras y compañeros tanto menores de edad como de todas las edades, incluso muchos padres han denunciado ante las autoridades escolares, quienes en muy pocas ocasiones han iniciado una investigación para determinar responsabilidades.

Estos incidentes deben generar una gran preocupación a toda la sociedad, en particular a padres de familia, maestros y autoridades educativas, quienes deben de actuar para tomar medidas y prevenir la violencia o acoso escolar y garantizar la seguridad de los estudiantes, a través de medidas o propuestas que incluyan la implementación de programas de prevención y manejo de conflictos, es muy importante la capacitación de maestros y alumnos en habilidades sociales y emocionales, y la promoción de una cultura de respeto y tolerancia en las escuelas.

Sabías que en México, dos de cada 10 estudiantes han sido víctimas de algún tipo de acoso escolar, y la mayoría de ellos está de acuerdo en que esta situación impacta en algún nivel su desempeño escolar.

Es importante recordar que la violencia o acoso escolar no solo afecta a las víctimas directas, sino que también tiene consecuencias negativas para el bienestar emocional y académico de toda la comunidad escolar, por ello, es necesario tomar en serio este problema y trabajar juntos para prevenirlo y abordarlo de manera efectiva.