Durante 118 días Maziar Bahari fue secuestrado y torturado por el régimen iraní, su delito fue informar al mundo sobre el polémico proceso electoral de 2009, donde manifestantes se oponían al régimen del reelegido presidente Mahmud Ahmadineyad, a partir de entonces Bahari iniciaría una trayectoria enfocada al activismo social que lo llevaría a visitar diversos lugares, el más reciente Atltzayanca.
Interesado por la actividad cultural y artística de un tranquilo poblado de apenas 14 mil habitantes, diametralmente opuesto a los más de 8 millones de una urbe como Teherán, donde las revueltas políticas forman parte del entorno, Maziar Bahari visitó la Galería del Agua y el Museo Comunitario, donde convivió con los pobladores para ser testigo de la interacción social en este municipio tlaxcalteca.
En entrevista para El Sol de Tlaxcala, el también realizador de cine documental afirmó que, de acuerdo con su experiencia, las artes y el periodismo local son las herramientas para mantener la identidad de un pueblo y con ello hacer frente a los problemas sociales.
“Escuché sobre los proyectos de arte que se están realizando en el Museo Comunitario de Atltzayanca a cargo de Ciclo y sobre lo que se lleva a cabo en la Galería del Agua, y me pareció que el trabajo conjunto en las pequeñas comunidades es lo que puede salvar al mundo de las crisis que enfrenta”, afirma.
LLAMA A PRESERVAR LA CULTURA LOCAL
Bahari opinó que uno de los principales obstáculos para la cohesión social es la pérdida de la identidad, generalmente ocasionada por las migraciones, por lo que consideró que la preservación de la cultura local y el papel de los periodistas en su difusión son primordiales.
“Veo al arte y al periodismo como dos partes de un todo, porque el arte permite a las personas expresar sus preocupaciones, miedos y frustraciones, mientras que el periodismo muestra lo que sucede en las comunidades, ambas situaciones conducen a un empoderamiento”, explicó Bahari.
Para el reportero iraní-candiense, el periodismo que se realiza en nivel local contrarresta los efectos de las noticias falsas que proliferan en las redes sociales, pues dijo que su labor es estar en contacto con la comunidad y mostrar la realidad a partir de un trabajo periodístico en el lugar de los hechos, a diferencia de los medios trasnacionales, que abordan la información de manera global.
Un ejemplo de la información tendenciosa es Filipinas -refirió Bahari- donde el gobierno utiliza Facebook como medio para desinformar, y es justamente el papel del periodismo local combatir esas noticias falsas.
Maziar Bahari terminó su visita a Tlaxcala con tres nuevos intereses: la problemática de la trata de personas asociada a Tenancingo, la identidad cultural de Atltzayanca y el sabor del pulque.
“El papel de los periodistas locales es combatir las noticias falsas”
Maziar Bahari fue secuestrado y torturado por el régimen iraní durante 118 días, su delito fue informar al mundo sobre el polémico proceso electoral de 2009, donde manifestantes se oponían al régimen del reelegido presidente Mahmud Ahmadineyad, a partir de entonces Bahari iniciaría una trayectoria enfocada al activismo social
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