El Covid-19 seguirá entre nosotros. Hasta que se encuentre una vacuna para combatir la actual pandemia que asola al mundo, todos los países deben tomar medidas estrictas para controlar nuevos brotes de esta enfermedad y, al mismo tiempo, garantizar un regreso a la actividad social, económica, cultural y educativa.
En México, la estrategia de reapertura tiene entre sus principios rectores: privilegiarla salud y la vida, así como la eficiencia productiva, por ello, la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac) presentó las pautas de preparación que deberán seguir los establecimientos, una vez que se levante la cuarentena.
Actualmente la mayoría de restaurantes ha cerrado sus puertas en atención a las restricciones por la contingencia sanitaria. Cabe mencionar este sector genera 300, 000 millones de pesos anuales en la República Mexicana, por lo que su reapertura aliviará la crisis laboral que enfrenta el rubro.
Así, restaurantes del país se preparan para “la nueva normalidad” con la implementación de acciones como: desinfección de espacios, uso obligatorio de cubrebocas y careta por parte del personal, reducción del número de comensales, readecuación de espacios y filtros de ingreso, entre otras.
PROTOCOLO “MESA SEGURA”
En este contexto, la Canirac elaboró el Protocolo de prevención Covid-19 “Mesa segura”, que fomenta sistemas de reserva en línea y pago electrónico, alienta el uso de un menú digital, desechable o de pizarra, establece un número máximo de diez personas por mesa, así como 1.5 metros de distancia entre comensales. También se alienta al uso de gel antibacterial y reforzar las medidas de higiene en el manejo de alimentos. Asimismo, el documento establece que las áreas infantiles deben permanecer cerradas.
Para seguridad de los comensales, el inmueble se desinfectará a profundidad y a los trabajadores se les capacitará para esta nueva etapa.
DISTANCIAMIENTO Y CABINAS
Cabe recordar que la transmisión de Covid-19 se produce por contacto con las secreciones respiratorias de una persona enferma, por lo que una de las medidas más notorias será el acondicionamiento de espacios para permitir un distanciamiento de 1.5 metros entre comensales; el protocolo también sugiere el uso de sillones booths o de cabina. De hecho, algunos establecimientos acondicionarán sus espacios con barreras físicas de aislamiento al estilo de pequeñas cabinas o cápsulas, con capacidad de hasta diez personas.
Estas medidas dependerán de la capacidad económica de cada establecimiento y deberán ser efectivas a partir del 10 de junio. Es posible que esto genere desconcierto e incluso molestia entre los clientes, no obstante, el objetivo es prevenir una nueva ola de contagios una vez que se termine la actual cuarentena.
ESCENARIOS FUTURISTAS
Para la segunda mitad del 2020, la “nueva normalidad” en restaurantes evocará escenas futuristas, ya que serán lugares asépticos donde las personas tendrán el rostro cubierto por caretas, las manos envueltas en guantes y la tecnología permeará en las transacciones.
Escritores y cineastas han plasmado escenarios de este estilo, sin embargo, como expresó Julio Verne “la realidad supera a la ficción”. En breve, la humanidad volcará sus recursos económicos y humanos en adaptarse a esta nueva realidad y algo tan básico como comer en un restaurante será una experiencia insólita.
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