Se acerca el Día de la Candelaria en México, pero esta fecha no solo es para comer tamales. La tradición católica del 2 de febrero indica que las imágenes del Niño Dios se deben vestir y llevar a la iglesia, pero ¡ojo! que no todos los atuendos están aprobados por las autoridades religiosas.
Desde la Diócesis de Tlaxcala, se recomienda lo siguiente:
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1.- Tratar a la imagen con respeto y dignidad, pues representa que Cristo nació, fue niño y creció entre nosotros.
2.- Si bien es una imagen, el Niño Dios no es un muñeco, por lo tanto, su vestimenta no debe entenderse como un disfraz.
3.- No lo vistas de santo, pues son ellos los que se quieren parecer a Jesús.
4.- La imagen del recién nacido Jesús no es un amuleto, así que se deben evitar las ideas de “Niño de éxito”, “Niño de la suerte” o “Niño de abundancia”.
5.- Lo que sí se aprueba es vestirlo a semejanza del Niño de las Palomas, del Sagrado Corazón, de Cristo Rey, El Buen Pastor, etcétera.
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ORIGEN DE LA TRADICIÓN
La Candelaria es una fiesta religiosa que se celebra cuarenta días después de Navidad y conmemora la presentación de Jesús en el templo de Jerusalén.
En la tradición judía, las madres debían esperar cuarenta días después del parto para purificarse y, hasta entonces, no podían presentar al bebé ante las autoridades religiosas.
Este ritual es uno de los más antiguos entre todas las que tiene dedicadas la Virgen durante el año y fue introducido por el papa Gelasio I en el año 496.
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En México, la variante de esta costumbre se une con la de los tamales que ofrecen todas aquellas personas a que les salió “muñeco” en la rosca de Reyes, pues el 2 de febrero se conmemora el nacimiento del sol en el calendario azteca, que también coincide con el comienzo de la temporada de siembra.
Para asegurar un buen temporal, los antiguos prehispánicos solían elaborar ofrendas a Tláloc y Quetzalcóatl con alimentos elaborados a base de maíz, entre los que destacaban los tamales.
Luego de la Conquista, algunas tradiciones se mantuvieron, entre ellas el consumo de tamales en febrero.