Elías Dávila Espinoza, responsable del albergue la Sagrada Familia, interpuso una queja ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) contra el Ayuntamiento de Apizaco, porque cerró con malla ciclónica un acceso federal.
El religioso denunció que hace 15 días, personal del Ayuntamiento de Apizaco, obstaculizó una calle de acceso al albergue en la colonia Ferrocarrilera (Colfer) y que también comunica a las vías del tren.
Calificó como antihumana la medida tomada por las autoridades municipales en común acuerdo con representantes de la Colfer.
El párroco de Cristo Rey comentó que al colocar la malla ciclónica en ese acceso, les impide cumplir con su encomienda de protección en la defensa de los derechos humanos.
Denunció que esta es otra flagrante violación al paso de migrantes, que se suma a la construcción de muros de adocreto en las inmediaciones a las vías del tren.
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