Este día, trabajadores del Sindicato Nacional Democrático de Trabajo de la Secretaría de Cultura, se manifestaron a las afueras de las instalaciones de esa dependencia federal como una forma de solicitar sean mejoradas sus condiciones laborales y sean respetados sus derechos como trabajadores.
Tal como lo habían anunciado, hoy cerraron las instalaciones de la Secretaría de Cultura (en la parte posterior), cuya sede es la capital de Tlaxcala, pues aseguraron que las decisiones tomadas por el gobierno federal impactan de forma negativa a los trabajadores que pertenecen al sector de técnicos y profesionistas del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
A través de un comunicado, explicaron que los recursos presupuestales para hacer frente a la crisis por la pandemia han repercutido en el pago de sus salarios y prestaciones.
Señalaron que aunque durante la emergencia sanitaria se ha cubierto su salario básico, el pago por las jornadas extraordinarias y de prestaciones se han desfasado en varios momentos.
"Lo más grave se ha dado con el bloqueo, condicionamiento y hasta el desconocimiento de prerrogativas de los trabajadores, establecidas en las Condiciones Generales de Trabajo, como las herramientas, equipo, ropa de trabajo y otros derechos", dice el documento.
Además, los afectados explicaron que desde el 28 de febrero de 2020, cuando en el país se registró el primer caso de Covid-19, quienes se encargan de la custodia, conservación, mantenimiento, y protección técnica y legal del patrimonio cultural, no han parado de laborar, puesto que se trata de áreas sustantivas de la dependencia federal.
Mencionaron que los recortes presupuestales del gobierno federal también han recrudecido la crisis que el INAH arrastra desde hace muchos años y que impacta negativamente en el desarrollo de las actividades sustantivas, como la docencia, la investigación y la conservación del patrimonio cultural, así como el mantenimiento en museos y zonas arqueológicas.
Además, indicaron que existe una restricción en la operación y servicios generales que, en el caso del INAH, afecta en el suministro de combustibles para el uso de equipos y maquinaria en la labor cotidiana de conservación del patrimonio cultural.
Continúa leyendo: