/ martes 23 de agosto de 2022

A todas nos pasa. Es normal

Aunque para muchas personas es un tema sin importancia, y para otras tantas sea tabú, motivo de estigma y hasta discriminación, el acceso a una menstruación digna debe ser fundamental para el diseño e implementación de políticas públicas con perspectiva de género. Las mujeres tenemos ese derecho y, como tal, se debe reconocer sin cortapisas.

“Eso” que les sucede a las mujeres cada 28 días, está íntimamente relacionado con la dignidad humana, y así debe verse y entenderse.

Desafortunadamente, en muchas ocasiones la falta de recursos o de condiciones adecuadas, y hasta la ignorancia sobre un tema de tanta naturaleza, puede causar situaciones de abandono escolar, laboral o de cualquiera de nuestras actividades diarias.

Hace unos días, en un programa de televisión, a una cantante supuestamente le tocó el inicio de su periodo. Mientras era entrevistada, la artista permaneció sentada, pero al levantarse, ya para despedirse, se dio cuenta que una mancha cubría la parte trasera de su pantalón blanco.

Al percatarse del hecho, una de las conductoras se acercó rápidamente para tapar a su compañera, mientras ella decía “uy, uy, uy, uy son cositas que pasan. Lo normal, lo normal. Todas las mujeres hemos pasado por esto”.

El video de ese momento se viralizó de manera rápida y “eso” que es tan normal en la vida de las mujeres, generó muchas opiniones en las llamadas benditas redes sociales; incluso, hubo gente que criticó a la artista sin piedad.

“Si ya sabes que te va a bajar, ¿por qué no usas protección?”, “tú tienes la culpa por no saber tus días”, “quién le manda usar pantalón blanco”, fueron algunos de los comentarios que, tristemente, la mayoría fueron de mujeres.

“Muchos están hablando de lo que me pasó hoy... Sí, me vino la regla y no estaba preparada. Estoy sorprendida con los comentarios. Algunos con vergüenza, otros juzgando, pero muchos más entendiéndome, ¿y saben por qué? Porque es NORMAL, a todas nos pasa”, escribió en su cuenta de Twitter la artista.

Después se supo que ese “accidente” había sido parte de una campaña emprendida por una marca de productos de higiene femenina y orientada a normalizar la menstruación para “saber que las mujeres grandes sí podemos entender estas situaciones, pero las niñas no”.

Más allá de ese montaje, la moraleja es que aún tenemos mucho que trabajar para normalizar la menstruación, que no debe avergonzarnos un hecho tan normal y que tampoco debemos ofrecer disculpas por eso.

De acuerdo con datos del Programa Higiene Menstrual del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), en México el 43% de las niñas y adolescentes prefieren quedarse en casa que ir a la escuela durante su periodo menstrual; el 30% utiliza papel higiénico en lugar de toallas sanitarias; el 66% piensa que los baños en sus escuelas están sucios; y el 73% se lava las manos sin jabón.

Ante esas circunstancias de precariedad, es claro que no todas podemos manejar nuestra menstruación con dignidad, y que debemos considerar que factores como la desigualdad de género, la pobreza extrema, y las tradiciones machistas, pueden provocar que la menstruación sea percibida como algo vergonzante, situación que nos estigmatiza y lastima nuestra dignidad.

Por eso es importante que se tomen las acciones necesarias para asegurar que las personas cuenten con una menstruación digna.

En nuestro país ya hay avances en la materia; sin embargo, aunque la ley para no tasar los productos de higiene íntima entró en vigor el 1 de enero de este año, de acuerdo al colectivo Menstruación Digna ésta no se aplicará hasta que los gobiernos de los estados de la República otorguen de manera gratuita los necesarios, al menos a quienes cursen la educación básica y a las personas privadas de su libertad.

Para el caso de Tlaxcala, es necesario recordar que, en mayo de 2021, la diputada local María Del Rayo Netzáhuatl Ilhuicatzi propuso reformar la Ley de Educación para el Estado de Tlaxcala, a fin de reconocer el derecho de la mujer a la educación y gestión de la menstruación digna.

El objetivo de dicha iniciativa es que el gobierno estatal y los ayuntamientos, así como las escuelas, brinden a las niñas, adolescentes y mujeres, productos de higiene gratuitos para la atención menstrual.

* Consejera de la Comisión Estatal de Derechos Humanos


Aunque para muchas personas es un tema sin importancia, y para otras tantas sea tabú, motivo de estigma y hasta discriminación, el acceso a una menstruación digna debe ser fundamental para el diseño e implementación de políticas públicas con perspectiva de género. Las mujeres tenemos ese derecho y, como tal, se debe reconocer sin cortapisas.

“Eso” que les sucede a las mujeres cada 28 días, está íntimamente relacionado con la dignidad humana, y así debe verse y entenderse.

Desafortunadamente, en muchas ocasiones la falta de recursos o de condiciones adecuadas, y hasta la ignorancia sobre un tema de tanta naturaleza, puede causar situaciones de abandono escolar, laboral o de cualquiera de nuestras actividades diarias.

Hace unos días, en un programa de televisión, a una cantante supuestamente le tocó el inicio de su periodo. Mientras era entrevistada, la artista permaneció sentada, pero al levantarse, ya para despedirse, se dio cuenta que una mancha cubría la parte trasera de su pantalón blanco.

Al percatarse del hecho, una de las conductoras se acercó rápidamente para tapar a su compañera, mientras ella decía “uy, uy, uy, uy son cositas que pasan. Lo normal, lo normal. Todas las mujeres hemos pasado por esto”.

El video de ese momento se viralizó de manera rápida y “eso” que es tan normal en la vida de las mujeres, generó muchas opiniones en las llamadas benditas redes sociales; incluso, hubo gente que criticó a la artista sin piedad.

“Si ya sabes que te va a bajar, ¿por qué no usas protección?”, “tú tienes la culpa por no saber tus días”, “quién le manda usar pantalón blanco”, fueron algunos de los comentarios que, tristemente, la mayoría fueron de mujeres.

“Muchos están hablando de lo que me pasó hoy... Sí, me vino la regla y no estaba preparada. Estoy sorprendida con los comentarios. Algunos con vergüenza, otros juzgando, pero muchos más entendiéndome, ¿y saben por qué? Porque es NORMAL, a todas nos pasa”, escribió en su cuenta de Twitter la artista.

Después se supo que ese “accidente” había sido parte de una campaña emprendida por una marca de productos de higiene femenina y orientada a normalizar la menstruación para “saber que las mujeres grandes sí podemos entender estas situaciones, pero las niñas no”.

Más allá de ese montaje, la moraleja es que aún tenemos mucho que trabajar para normalizar la menstruación, que no debe avergonzarnos un hecho tan normal y que tampoco debemos ofrecer disculpas por eso.

De acuerdo con datos del Programa Higiene Menstrual del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), en México el 43% de las niñas y adolescentes prefieren quedarse en casa que ir a la escuela durante su periodo menstrual; el 30% utiliza papel higiénico en lugar de toallas sanitarias; el 66% piensa que los baños en sus escuelas están sucios; y el 73% se lava las manos sin jabón.

Ante esas circunstancias de precariedad, es claro que no todas podemos manejar nuestra menstruación con dignidad, y que debemos considerar que factores como la desigualdad de género, la pobreza extrema, y las tradiciones machistas, pueden provocar que la menstruación sea percibida como algo vergonzante, situación que nos estigmatiza y lastima nuestra dignidad.

Por eso es importante que se tomen las acciones necesarias para asegurar que las personas cuenten con una menstruación digna.

En nuestro país ya hay avances en la materia; sin embargo, aunque la ley para no tasar los productos de higiene íntima entró en vigor el 1 de enero de este año, de acuerdo al colectivo Menstruación Digna ésta no se aplicará hasta que los gobiernos de los estados de la República otorguen de manera gratuita los necesarios, al menos a quienes cursen la educación básica y a las personas privadas de su libertad.

Para el caso de Tlaxcala, es necesario recordar que, en mayo de 2021, la diputada local María Del Rayo Netzáhuatl Ilhuicatzi propuso reformar la Ley de Educación para el Estado de Tlaxcala, a fin de reconocer el derecho de la mujer a la educación y gestión de la menstruación digna.

El objetivo de dicha iniciativa es que el gobierno estatal y los ayuntamientos, así como las escuelas, brinden a las niñas, adolescentes y mujeres, productos de higiene gratuitos para la atención menstrual.

* Consejera de la Comisión Estatal de Derechos Humanos