“La formación teatral genera seres humanos más conscientes, coherentes, críticos pero también empáticos con quienes nos rodean, porque el ponerse en la piel de un personaje te permite entender la historia de vida del otro, y es esta una de las principales razones por las que creo que el teatro es una maravillosa herramienta social”, así es como define la actriz tlaxcalteca Ana Laura Lima Meneses esta disciplina en la que cuenta con una trayectoria de 22 años.
A propósito del Día Mundial del Teatro que se celebró el 27 de marzo, este Diario platicó con la también productora y directora teatral quien comparte su experiencia en esta disciplina desde diversas aristas.
Desde los 14 años Ana Laura Lima inició su formación teatral, pues a partir de ese primer contacto sintió que esta era su vocación de vida, “Siempre me gustó participar en diferentes actividades artísticas como la música o la danza, pero recuerdo perfecto una ocasión en la que llegando a mis clases, en el Centro Cultural La Libertad, me topé con el ensayo de ‘Sueño de una noche de verano’ del Grupo Tlaloque que dirigía la maestra Gloría Miravete a quien considero como una formadora de actores y actrices, y desde momento mi primer contacto con el teatro fue como amor a primera vista”, enfatizó Lima.
Luego de su formación inicial con este grupo teatral, Ana Laura Lima decidió continuar con sus estudios de teatro en la Universidad Veracruzana, lo que marcaría su futuro y una larga estadía en Xalapa, Veracruz desarrollando su profesión.
“Fueron 15 años los que estuve en Xalapa trabajando como actriz en la Compañía de Teatro Infantil de la Secretaría de Educación de Veracruz que hacía presentaciones por la sierra veracruzana lo cual fue una experiencia muy enriquecedora; también hice televisión educativa, radionovelas y comencé un diplomado de cine, lo que me permitió incursionar en la producción de documental”, abundó.
Luego de estos años de experiencia, Lima Meneses comenzó a ejercer la docencia con infantes y jóvenes, actividad que le ha representado una gran oportunidad para compartir sus conocimientos pero, sobretodo, los valores que considera son inherentes al desarrollo actoral.
“He visto de qué manera la formación actoral se convierte en una poderosa herramienta de autoconocimiento; los alumnos tienen más confianza en ellos mismos, son más activos y más competitivos, se convierten en observadores del mundo y al ponerse en la piel del personaje también se deja de juzgar al otro y hay un mejor entendimiento de sus propias problemáticas” abundó la actriz.
Actualmente, Ana Laura Lima se desempeña como docente de la Facultad de Teatro de su alma máter, la Universidad Veracruzana, y también como encargada del taller de teatro para niños y jóvenes en el Centro de las Artes de Tlaxcala, así como en otras instituciones particulares donde se avoca a la formación de nuevos talentos. Asimismo, la artista es fundadora de la compañía “Caminito Teatro” donde se desempeña como actriz y directora.
“El estar en escena te permite conectar de una manera muy particular con el público porque es compartir en un mismo instante un cúmulo de emociones, lo cual es un momento energético muy fuerte”, sostuvo.
El teatro es crítica, denuncia, sensibilidad y es un espacio en el que por un momento se borran todas las barreras para fundirse actor y público en una experiencia de emociones
Ana Laura Lima / directora teatral
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