Ante la actividad permanente del volcán Popocatépetl, familias tlaxcaltecas percibieron caída de ceniza este uno y dos de enero tras las explosiones que registró el coloso.
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Compartieron que las pruebas están en los toldos de sus automóviles y en sus patios, donde se observó el material que arrojó el “Popo”, por lo que procedieron a retirarlo respetando las recomendaciones de las autoridades.
El Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred), informó que en las últimas 24 horas el coloso registró 77 exhalaciones y mil 20 minutos de tremor acompañados por emisiones de gases volcánicos y ceniza, lo que originó que, en momentos, la columna tuviera una altura máxima de 500 metros y se dispersó principalmente al noroeste del país.
La dependencia detalló que también reportaron una explosión a las 19.04 horas del uno de enero, estuvo acompañada de expulsión de algunos fragmentos incandescentes que se depositaron dentro del mismo cráter.
El Cenapred subrayó que el Semáforo de Alerta Volcánica del Popocatépetl se encuentra en amarillo fase 2, por lo que pidió a la población no acercarse por el peligro que implica la caída de fragmentos balísticos.
Por su parte, la Coordinación Estatal de Protección Civil argumentó que no registró caída de ceniza en la entidad. Pero sugirió a la gente barrerla la ceniza de techos, patios, calles, depositarla en bolsas, no arrojarla a las alcantarillas y cubrir los tinacos de agua.
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