/ miércoles 15 de noviembre de 2023

¡El lenguaje incluyente no mata, el odio sí!

Este día quiero aprovechar este espacio para hablar sobre el lamentable deceso del magistrade Jesús Ociel Baena, ocurrido el martes de esta semana, una persona que sentó un precedente muy importante en la lucha a favor de los derechos de la comunidad LGBTTTIQ+, y cuya muerte ha generado encono entre la sociedad, no solo por las condiciones de su deceso, sino por la falta de una debida diligencia por parte de las autoridades para abordar el caso.

Como Organismo Público de Derechos Humanos (OPDH), manifestamos nuestro profundo duelo y memoria, por lo que hemos urgido a las autoridades competentes a conducir las investigaciones del lamentable suceso con un enfoque que respete los derechos humanos y considere la perspectiva de género, asegurando la adhesión a los principios de igualdad, no discriminación y respeto a la diversidad, conforme a los estándares internacionales y nacionales.

Pero también nos hemos sumado a la exigencia de que exista una debida diligencia en este caso, por tratarse de un delito que podría relacionarse con la orientación sexual, identidad de género, expresión de género -real o percibida- y/o respecto a las características sexuales de las personas, toda vez que pueden constituir una expresión de odio.

Más aún, cuando de acuerdo con el Observatorio Nacional de Crímenes de Odio contra Personas LGBTI+ en México, nuestro país se ha convertido en el segundo con más crímenes de odio de Latinoamérica con 305 hechos violentos de 2019 a 2022, incluyendo asesinatos y desapariciones.

Por ello, desde la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Tlaxcala nos sumamos al pronunciamiento que la Federación Mexicana de Organismos Públicos de Derechos Humanos ha hecho para solicitar una exhaustiva investigación de los hechos ante la muerte del magistrade, Ociel Baena Saucedo, quien fuera activista a favor de los derechos políticos de las personas LGBTTTIQA+, específicamente no binarias y quien fue la primera persona en América Latina en rendir protesta como magistrade electoral no binario, el 1 de octubre del 2022.

Baena Saucedo se destacó por su compromiso con la democracia y a través de su trabajo por la defensa de los derechos de integrantes de la comunidad LGBT+, el lenguaje inclusivo y el reconocimiento de las diversidades y sus identidades, subrayando el reconocimiento de sus derechos político-electorales, marcando un antes y un después en estos temas.

El pasado martes fueron encontrados sin vida el magistrade Ociel Baena y otra persona, por ello, quienes integramos la FMOPDH nos unimos a la pena que ha generado a sus familias, amigues y a todo el país ésta irremediable pérdida y manifestamos lo siguiente:

1. Considerando que le magistrade era una persona inscrita en el mecanismo de protección de defensores de derechos humanos por amenazas, éstas deben ser consideradas en la investigación;

2. Las autoridades deben evitar conclusiones inmediatas y estigmatizantes, así como actuar con debida diligencia reforzada;

3. Las personas servidoras públicas encargadas de llevar a cabo la investigación deben ser responsables con el uso de la información e imagen de las víctimas directas, absteniéndose de difundir fotografías y videos de ellas para no incurrir en victimización secundaria; y,

4. Las instituciones de procuración y administración de justicia deben realizar una investigación pronta y expedita y no descartar ninguna línea de investigación para el total esclarecimiento de los hechos y, con ello, garantizar el derecho a la justicia y a la verdad.

La tolerancia consiste en el respeto, la aceptación y el aprecio de la diversidad de las culturas de nuestro mundo, de nuestras formas de expresión y medios de ser humanos, la fomentan el conocimiento, la actitud de apertura, la comunicación y la libertad de pensamiento, de conciencia y de religión.

La tolerancia es fundamental para evitar la discriminación y las violencias, por ello, nos sumamos al repudio de la intolerancia y los discursos de odio y hacemos un llamado a la sociedad en general a respetar la identidad y dignidad del magistrade, y que entiende que: ¡El lenguaje incluyente no mata, pero el odio sí!


*Presidenta de la Comisión Estatal de Derechos Humanos


Este día quiero aprovechar este espacio para hablar sobre el lamentable deceso del magistrade Jesús Ociel Baena, ocurrido el martes de esta semana, una persona que sentó un precedente muy importante en la lucha a favor de los derechos de la comunidad LGBTTTIQ+, y cuya muerte ha generado encono entre la sociedad, no solo por las condiciones de su deceso, sino por la falta de una debida diligencia por parte de las autoridades para abordar el caso.

Como Organismo Público de Derechos Humanos (OPDH), manifestamos nuestro profundo duelo y memoria, por lo que hemos urgido a las autoridades competentes a conducir las investigaciones del lamentable suceso con un enfoque que respete los derechos humanos y considere la perspectiva de género, asegurando la adhesión a los principios de igualdad, no discriminación y respeto a la diversidad, conforme a los estándares internacionales y nacionales.

Pero también nos hemos sumado a la exigencia de que exista una debida diligencia en este caso, por tratarse de un delito que podría relacionarse con la orientación sexual, identidad de género, expresión de género -real o percibida- y/o respecto a las características sexuales de las personas, toda vez que pueden constituir una expresión de odio.

Más aún, cuando de acuerdo con el Observatorio Nacional de Crímenes de Odio contra Personas LGBTI+ en México, nuestro país se ha convertido en el segundo con más crímenes de odio de Latinoamérica con 305 hechos violentos de 2019 a 2022, incluyendo asesinatos y desapariciones.

Por ello, desde la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Tlaxcala nos sumamos al pronunciamiento que la Federación Mexicana de Organismos Públicos de Derechos Humanos ha hecho para solicitar una exhaustiva investigación de los hechos ante la muerte del magistrade, Ociel Baena Saucedo, quien fuera activista a favor de los derechos políticos de las personas LGBTTTIQA+, específicamente no binarias y quien fue la primera persona en América Latina en rendir protesta como magistrade electoral no binario, el 1 de octubre del 2022.

Baena Saucedo se destacó por su compromiso con la democracia y a través de su trabajo por la defensa de los derechos de integrantes de la comunidad LGBT+, el lenguaje inclusivo y el reconocimiento de las diversidades y sus identidades, subrayando el reconocimiento de sus derechos político-electorales, marcando un antes y un después en estos temas.

El pasado martes fueron encontrados sin vida el magistrade Ociel Baena y otra persona, por ello, quienes integramos la FMOPDH nos unimos a la pena que ha generado a sus familias, amigues y a todo el país ésta irremediable pérdida y manifestamos lo siguiente:

1. Considerando que le magistrade era una persona inscrita en el mecanismo de protección de defensores de derechos humanos por amenazas, éstas deben ser consideradas en la investigación;

2. Las autoridades deben evitar conclusiones inmediatas y estigmatizantes, así como actuar con debida diligencia reforzada;

3. Las personas servidoras públicas encargadas de llevar a cabo la investigación deben ser responsables con el uso de la información e imagen de las víctimas directas, absteniéndose de difundir fotografías y videos de ellas para no incurrir en victimización secundaria; y,

4. Las instituciones de procuración y administración de justicia deben realizar una investigación pronta y expedita y no descartar ninguna línea de investigación para el total esclarecimiento de los hechos y, con ello, garantizar el derecho a la justicia y a la verdad.

La tolerancia consiste en el respeto, la aceptación y el aprecio de la diversidad de las culturas de nuestro mundo, de nuestras formas de expresión y medios de ser humanos, la fomentan el conocimiento, la actitud de apertura, la comunicación y la libertad de pensamiento, de conciencia y de religión.

La tolerancia es fundamental para evitar la discriminación y las violencias, por ello, nos sumamos al repudio de la intolerancia y los discursos de odio y hacemos un llamado a la sociedad en general a respetar la identidad y dignidad del magistrade, y que entiende que: ¡El lenguaje incluyente no mata, pero el odio sí!


*Presidenta de la Comisión Estatal de Derechos Humanos