En el primer día del triduo pascual que correspondió al Jueves Santo, Julio César Salcedo Aquino, obispo de Tlaxcala, bendijo el Santo Crisma, que es el aceite utilizado en los sacramentos de la Iglesia Católica.
Uno de los momentos principales de la misa crismal efectuada en la Catedral de Nuestra Señora de la Asunción de Tlaxcala, fue la presentación del aceite en vasijas plateadas para mezclarlo con fragancias y bálsamo, que posteriormente será untado en los enfermos, los bautizados, en los difuntos y otros sacramentos que toman los fieles.
En la oración previa a la bendición, el obispo explicó que los aceites son un signo de fortaleza y es empleado para curar las dolencias de los enfermos, salvación de los fallecidos y fortalecer a los catecumenos que serán ungidos para que comprendan el evangelio de Cristo, afronten las exigencias de la vida cristiana e iluminen la iglesia.
Mencionó que el aceite fecundo proviene del árbol de óleo y con la bendición se convierte en protección del cuerpo, alma y espíritu de quien sea ungido.
Te recomendamos: ➡️ Agradece Obispo de Tlaxcala por retorno de procesiones
Además, indicó que el Santo Crisma también es señal de alegría, vida y bendición de quienes son santificados.
Previo a la bendición, el obispo de Tlaxcala indicó que invitó a los enfermos del sacerdocio y de la feligresía a la celebración eucarística para pedir por su sanación.
En su mensaje, Salcedo Aquino dijo que la misa crismal es un don para pedir por los sacerdotes de Tlaxcala y el pueblo de Dios, de ahí que solo a ellos les permitieron la entrada, el resto de asistentes permaneció fuera de la Catedral, donde fueron colocadas pantallas y sillas para seguir la ceremonia.
➡️ Suscríbete a nuestro Newsletter y recibe las notas más relevantes en tu correo
SE VIVEN TIEMPOS DIFÍCILES: OBISPO
El obispo de Tlaxcala Julio César Salcedo Aquino, habló sobre la caridad pastoral del sacerdote, que no solo fluye de la eucaristía, sino que en ella encuentra su más alta realización, pues les permite encontrar la respuesta para la unidad de la vida interior con tareas y responsabilidades del ministerio.
Expresó a la feligresía que se viven tiempos difíciles en la patria al experimentar inseguridad y violencia manifestada de varias maneras.
No dejes de leer: ➡️ Debe la Iglesia ser de cercanía y esperanza: Obispo de Tlaxcala
Detalló que los sacerdotes están llamados a respetar la dignidad humana desde la fecundación hasta la muerte natural, es necesario promover la dignidad de la mujer y la cercanía con los migrantes.
Indicó que ha iniciado un proceso electoral y desean que sea realizado en paz y transparencia, que el pueblo mexicano haga consciencia de su compromiso nacional para que salga a votar elija dirigentes que busquen el bien común.
Agregó que trabajan con los diálogos por la paz para tener consciencia que la paz es construcción artesanal y pidió cuidar la casa común que ha sido dañada por la propia causa.
Entérate: ➡️ Ser madre religiosa es algo más que orar: María Teresa Juárez
Para responder a estar realidades, dijo que es necesaria la presencia y los sacerdotes deben dar testimonio de Jesús creando puentes, construyendo día con día la paz a través de la oración, la presencia con las familias, enfermos y con los que sufren diversas situaciones existenciales, para tener gestos de cercanía, confianza y ternura, ese es el espíritu de la caridad pastoral, alma del ministerio sacerdotal.
Al concluir la celebración, los sacerdotes salieron de la catedral y los feligreses lograron ingresar al recinto católico.