En los últimos 45 años las tasas de suicidio han aumentado en un 60 por ciento a nivel mundial, siendo este una de las tres primeras causas de defunción entre las personas de 15 a 44 años en algunos países, y la segunda causa en el grupo de 10 a 24 años, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Y aunque tradicionalmente las mayores tasas de suicidio se han registrado entre los varones de edad avanzada, las tasas entre los jóvenes han ido en aumento hasta el punto de que ahora estos son el grupo de mayor riesgo en un tercio de los países, tanto en el mundo desarrollado como en el mundo en desarrollo.
En México, 15 de cada de 100 habitante sufren depresión, la primera causa del suicidio en el país y en el mundo; mientras que la OMS pronostica que para este año, la depresión será la segunda causa de discapacidad en el mundo, y la primera en países en vías de desarrollo.
¿CÓMO AYUDAR?
Existen diversas maneras de ayudar como lo más simple: la comunicación. Debemos hacerle sentir a la persona que no está sola. El sentirse acompañado y apoyado le permitirá enfrentar de forma diferente las cosas.
Además, se debe contactar a un médico para que pueda canalizar a la persona a un tratamiento psicológico o psiquiátrico.
Por otra parte, existen métodos desarrollados por expertos, como el caso de QPR (Question, Persuade and Refer), del Tecnológico de Monterrey, el cual está pensado para ofrecer esperanza mediante una acción positiva.
¿CÓMO FUNCIONA?
(Q) Pregunta: Acércate directamente y muestra interés por esa persona, intenta con algunas preguntas como, ¿Te sientes bien? ¿Hay algo en lo que te pueda ayudar? ¿Necesitas hablar con alguien?
(P) Persuade: Escúchalo y ofrécele tu atención para poder mantenerlo vivo.
(R) Refiere: Lleva a la persona con alguien que pueda ayudarlo, establece un compromiso para que acuda o bien, hablale sobre especialistas cercanos.
Javier Guevara, líder en el área de Bienestar y Consejería del Tec en San Luis Potosí, señala que además de aprender este método, desarrollarás habilidades como el ser empático, saber escuchar y ser paciente.
“Entre más ojos, manos y corazones estén allá afuera sensibilizados y dispuestos a apoyar, tendremos mayores posibilidades de salvar vidas”, expresa, al tiempo que invita a ser “guardianes” de su comunidad a través de la capacitación del Método QPR, la cual podrá ser agendada a través del siguiente enlace.
Asimismo, pide contactar a línea de atención “T-Queremos”, si conoces a alguien en situación de riesgo, cuya plataforma de ayuda está disponible las 24 horas, todos los días. (01800 - 813 -9500).
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