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La demanda de amparo indirecto que interpuso la alcaldesa de Yauhquemehcan, María Anita Chamorro Badillo, por las violaciones al procedimiento en la auditoría del ejercicio fiscal 2022, ordenada por la Auditora del Órgano de Fiscalización Superior del Congreso del Estado de Tlaxcala, no prosperó.
El Poder Judicial de la Federación desechó la querella al ser improcedente el argumento de la autoridad municipal.
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De este modo, al momento, la comprobación de gastos del ejercicio anterior, no justifica a la administración municipal del probable daño patrimonial a las arcas de la tesorería por 14 millones 786 mil 267 pesos con 69 centavos.
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Lo anterior, según las observaciones emitidas por Órgano de Fiscalización Superior, asciende a 14 millones 786 mil 267 pesos con 69 centavos, donde, incluso, se incluyó el gasto de la campana del bicentenario que donaron los pobladores.
Ahora, la autoridad municipal buscará otra instancia para defender su postura ante el procedimiento de los auditores.
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También, en otro caso, el Tribunal Electoral de Tlaxcala sentenció la inexistencia de violencia política y de género contra la presidenta municipal.
Y es que la alcaldesa interpuso dicha demanda en contra de ciudadanos y algunos regidores del ayuntamiento.
Entre los denunciados está la regidora Sandra Mirelva Sánchez Sánchez, quien se ha caracterizado por exponer en las sesiones de cabildo y públicamente las irregularidades detectadas en la administración de María Anita Chamorro Badillo.
Decir la verdad incomoda a la presidenta, pero es mi obligación velar por los intereses del pueblo, no tengo otro interés político que comunicar a la gente de lo que sucede en el seno del ayuntamiento, detalló Sandra Sánchez.
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Según la demanda, textualmente señala: “la tercer regidora Sandra Mirelva Sánchez Sánchez, quien constantemente me agrede y ofende, mal informando a la ciudadanía, aprovechando el uso de la voz que tiene en las sesiones de cabildo, por lo que a todas luces y sin ser perito, ejecuta actos que tienden a violentarme física, emocional, patrimonial y políticamente, por lo que actualmente solamente la regidora Sandra Mirelva Sánchez Sánchez han tratado de seguir denigrando, mancillando y ofendiendo mi trabajo, criticando de manera violenta todo lo que realizo y agrediéndome a través de comentarios y/o páginas sociales, específicamente”.
De esta manera, el documento que obra en poder de este Diario, señala que “por cuanto a los comentarios realizados por la tercera regidora durante las sesiones de cabildo señaladas por la denunciante, no pasa desapercibido para este Tribunal que, en algunas de las sesiones de cabildo que fueron materia de estudio, el tono de voz de la tercera regidora al expresar sus comentarios se considera vehemente e impetuoso. Sin embargo, no se encontraron insultos, amenazas o improperios dirigidos a la presidenta municipal”.
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Ante esto, no se acreditó la configuración de violencia verbal por parte de la denunciada Sandra Mirelva Sánchez Sánchez, sólo encontraron parcialmente violencia de tipo psicológico, que ameritó una recomendación que incluye a todos los demandados.
Está en marcha un movimiento de extrabajadores para demandar ante los tribunales laborales a la alcaldesa por despido injustificado, con esto, se convertirá en el ayuntamiento con más demandas interpuestas y recibidas en el estado.
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