Cada 28 de diciembre, los católicos recuerdan el acto fatídico en el que el rey Herodes ordenó la matanza de los niños menores de dos años, a principios de la época, al enterarse del nacimiento del Mesías, el fatídico hecho sirve para recordar a todos los Santos Inocentes, con la intención de privilegiar el derecho a la vida, refiere el vocero de la Diócesis de Tlaxcala, Cristóbal Gaspariano Tela.
El presbítero señaló que estos días convocan a la reflexión de los actos que atentan contra la niñez, pero refirió que “hoy en día, así como Herodes mando a matar a muchos niños, hay de repente algunas acciones con las que se está propiciando la muerte de bebés de niños, por ejemplo, a través del aborto, de las familias a través del maltrato infantil”.
Exclamó que desde la Iglesia se tienen que promover los valores desde las familias que privilegien el derecho a una niñez sana, lejos de acciones que atenten contra su integridad.
Con celebraciones religiosas, los feligreses todavía conservan con arraigo este tipo de tradiciones, quienes acuden a escuchar el mensaje de la Iglesia para proteger a la niñez tlaxcalteca, el fomento de valores y el respeto por la vida, que es una de los principales aspectos que se promueven desde las parroquias.
LAS BROMAS NO ESTÁN RELACIONADAS CON LA LITURGIA
El párroco señaló que gastarse bromas en esta fecha no tiene relación alguna con la liturgia o alguna connotación religiosa, explicó que no están en contra de este tipo de prácticas en estos días pues es parte del humor mexicano.
Comentó que a pesar de que no se tiene alguna relación con las celebraciones religiosas, siempre y cuando estas actitudes no causen alguna molestia es una forma sana de recordar la fecha.
Las sagradas escrituras no establecen en su contenido que se debe realizar bromas en esta fecha, por lo que el origen de esta tradición es incierto, aunque se cree que surgen desde las fiestas paganas romanas como las del Sol Invencible y las Saturnales.
Cristóbal Gaspariano Tela, Vocero de la Diócesis de Tlaxcala
El día de los Santos Inocentes nos convoca a seguir valorando y protegiendo la vida, desde la concepción hasta la muerte natural”.
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