- Exhibía antigüedades que daban testimonio de la importancia que cobró el municipio por las actividades de embarque de pulque de la región, semillas y ganado
Solo un armón de vía y una placa fue lo que quedó del Museo de la Memoria de Nanacamilpa y Sitio del Ferrocarril, que fue instalado en el año 2012 en la exestación que se ubica en la comunidad de Miguel Lira y Ortega de esta demarcación, con el fin de exhibir parte de la historia de ese medio de transporte en la comuna.
Desde hace varios años, autoridades en turno y pobladores de diferentes comunidades de Nanacamilpa habían recolectado, mediante donaciones, antigüedades relacionadas con el ferrocarril.
Incluso, extrabajadores de Ferrocarriles Nacionales de México y vecinos aportaron diversas piezas para crear un museo que diera testimonio de la importancia que representó para la entidad y en especial para esta demarcación, este medio de transporte.
Así, después de realizar los trámites necesarios ante dependencias correspondientes para disponer de la exestación que se ubica en la comunidad de Miguel Lira y Ortega, la cual estuvo en servicio de 1893 a 1999, los vecinos Andrés Espejel y Martín Montalvo instalaron el museo en este lugar para exhibir antigüedades que dan testimonio de la importancia que cobró el municipio por las actividades de embarque de pulque de la región, semillas y ganado.
El museo contaba con exhibidores, herramientas que utilizaban los trabajadores cuando se descarrilaba un tren, así como para la reparación de vías y colocación de durmientes, fotografías, un telégrafo, candados antiguos y lámparas de uso ferrocarrilero, entre otras cosas.
Pobladores aseguraron que ven con tristeza que fue en vano todo el esfuerzo por preservar una parte de la historia de ese municipio, así como poder mostrar a nuevas generaciones y visitantes, la importancia del ferrocarril como detonante de la economía de la comuna en esos tiempos, ya que el museo desapareció.
DIFÍCIL RECUPERAR LO QUE DESAPARECIÓ: SOSA
A todo esto, el presidente de comunidad, Francisco Sosa Hernández, aseguró que al asumir el cargo se dio cuenta que el museo dejó de existir, ya que no recibió ningún inventario para verificar qué antigüedades había en el lugar y a partir de qué fecha desaparecieron, pues hasta el momento solo saben que la pasada administración no dejó nada.
Afirmó que en su momento hubo muchas anomalías con relación al museo, pues desconoce si fue registrado ante el Instituto Nacional de Antropología e Historia, con el fin de contar con un listado de cosas para preservar el contenido y evitar el saqueo.
Agregó que al menos el 50 % de la techumbre del edificio era de lámina y estaba dañada, por lo que con apoyo del alcalde Víctor Hugo Sánchez Flores, la cambiaron.
ORIGEN
En 2012 los vecinos Andrés Espejel y Martín Montalvo instalaron el museo para exhibir antigüedades que dan testimonio de la importancia que cobró el municipio por las actividades de embarque de pulque de la región, semillas y ganado.
Hay intención de reinstalar el museo, pero es difícil recuperar lo que desapareció
Francisco Sosa / Presidente de comunidad