El rover de la misión Perseverance, de Mars 2020, de la NASA ha aterrizado en Marte este jueves 18 de febrero, luego de un trayecto de 480 millones de kilómetros que inició en julio de 2020.
El viaje tiene la misión de buscar vida en el planeta rojo luego de superar los “siete minutos de terror”, como se le conoce al tiempo que tarda el rover, un vehículo diseñado y fabricado por el Laboratorio de Propulsión a reacción, en desacelerar de forma automática desde los 19.500 km/h al entrar a la atmósfera de Marte hasta los aproximadamente 3 km/h con los que posa en su superficie. Este sistema de aterrizaje ya se había utilizado en el rover Curiosity y los ingenieros de la NASA consideran que han funcionado bien.
Con una temperatura de hasta 1.300 grados centígrados, la separación de la etapa crucero está programada para las 20:38 y, 10 minutos después, ingresará en la atmósfera. El rover aterrizará en la superficie marciana a las 20:55, explicó la agencia estadounidense. El espacio de descenso será el área que pertenece al cráter de Jezero, un antiguo lago de 45 kilómetros de diámetro.
El rover del tamaño de un automóvil y pesa 1.025 kilogramos. Mide unos 3 metros de largo, 2,7 metros de ancho y 2,2 metros de alto. A través de sus micrófonos y cámaras integradas, la NASA podrá mostrar por primera vez su aterrizaje en otro planeta.
La misión pretende buscar indicios de antigua vida microbiana, recoger y almacenar regolito marciano (fragmentos de rocas, minerales y polvo que quedan en la superficie del planeta), así como recopilar datos sobre la geología y el clima, preparando el camino para la exploración humana del planeta rojo, de acuerdo con RT. Este programa tiene como objetivo durar dos años terrestres con sus siete instrumentos integrados.
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