/ martes 28 de septiembre de 2021

Justicia: la herramienta política

En 2018 fuimos testigos del uso evidente del aparato de justicia, volcado en contra del entonces candidato presidencial Ricardo Anaya.

Todo partió de boletines ambiguos publicados por la Fiscalía, en la que se presumía la probable responsabilidad de Ricardo en diversos delitos de índole federal; meses después, fue la propia Fiscalía quien confirmó que no había proceso en su contra.

La película donde la Fiscalía se convierte en un brazo operador del Gobierno en turno, ya la habíamos visto en el pasado, una prueba más, de que no hay transformación alguna, como se ha dicho una y otra vez en la narrativa gubernamental.

La semana pasada, el Grupo Parlamentario del PAN en la cámara de senadores, levantamos la voz para rechazar de manera contundente, la persecución a 31 investigadores por parte de la Fiscalía General de la República. ¿Cuál es el delito?

Esta es la segunda ocasión en la que un juez echa para abajo la intención de capturar a 31 investigadores del CONACYT, por supuestas asignaciones millonarias en contra del erario, teniendo como consecuencia la vinculación a proceso por los delitos de delincuencia organizada, operaciones con recursos de procedencia ilícita y peculado.

¿Por qué la Cuarta Transformación persigue a la ciencia y deja libre a los delincuentes?

Fuimos testigos, de propia voz del presidente de México, sobre su determinación para liberar a delincuentes perseguidos en varios países, por delitos contra la salud y delincuencia organizada, que pese a los operativos de las fuerzas armadas, bastó una llamada desde Palacio Nacional para dejarlos libres, bajo el argumento de ‘abrazos, no balazos’.

La persecución y hostigamiento en contra de los 31 académicos, lejos está de ser un verdadero caso de investigación en contra de la delincuencia organizada, y mientras la Fiscalía sigue distraída en estos temas, la verdadera delincuencia que aqueja al país, está libre y haciendo de las suyas.

Estamos ante hechos sumamente lamentables en donde la justicia, una vez más y contra todo pronóstico, sigue siendo utilizada como brazo opresor en contra de quienes piensan distinto al Gobierno.

Desde el Senado, seguiremos insistiendo para que el Fiscal General de la República, comparezca ante el pleno de la cámara, con el fin de evitar que se consume un hecho que sería absolutamente vergonzoso para el país, e injusto para la comunidad académica y científica.

Migrantes en México

Grave es la situación que vivió nuestro país la semana pasada, al ser testigos de que cientos migrantes, principalmente provenientes de Haití, crearon un campamento improvisado debajo del puente que une a México con los Estados Unidos.

No hay una estrategia para prevenir que estos sucesos ocurran, ni mucho menos una política migratoria que respete los derechos de los migrantes, y que a su vez, cumpla con hacer respetar las leyes migratorias en nuestro país.

Durante este sexenio hemos sido testigos de diversas crisis migratorias en las que el Gobierno federal se ha visto rebasado. Con claridad puedo decirle, estimado lector, que ese es el resultado de la falta de visión y estrategia en el gobierno de la 4T.

Mientras no se cambie el rumbo, la situación migratoria en México, no mejorará. Agradezco el favor de su lectura.

En 2018 fuimos testigos del uso evidente del aparato de justicia, volcado en contra del entonces candidato presidencial Ricardo Anaya.

Todo partió de boletines ambiguos publicados por la Fiscalía, en la que se presumía la probable responsabilidad de Ricardo en diversos delitos de índole federal; meses después, fue la propia Fiscalía quien confirmó que no había proceso en su contra.

La película donde la Fiscalía se convierte en un brazo operador del Gobierno en turno, ya la habíamos visto en el pasado, una prueba más, de que no hay transformación alguna, como se ha dicho una y otra vez en la narrativa gubernamental.

La semana pasada, el Grupo Parlamentario del PAN en la cámara de senadores, levantamos la voz para rechazar de manera contundente, la persecución a 31 investigadores por parte de la Fiscalía General de la República. ¿Cuál es el delito?

Esta es la segunda ocasión en la que un juez echa para abajo la intención de capturar a 31 investigadores del CONACYT, por supuestas asignaciones millonarias en contra del erario, teniendo como consecuencia la vinculación a proceso por los delitos de delincuencia organizada, operaciones con recursos de procedencia ilícita y peculado.

¿Por qué la Cuarta Transformación persigue a la ciencia y deja libre a los delincuentes?

Fuimos testigos, de propia voz del presidente de México, sobre su determinación para liberar a delincuentes perseguidos en varios países, por delitos contra la salud y delincuencia organizada, que pese a los operativos de las fuerzas armadas, bastó una llamada desde Palacio Nacional para dejarlos libres, bajo el argumento de ‘abrazos, no balazos’.

La persecución y hostigamiento en contra de los 31 académicos, lejos está de ser un verdadero caso de investigación en contra de la delincuencia organizada, y mientras la Fiscalía sigue distraída en estos temas, la verdadera delincuencia que aqueja al país, está libre y haciendo de las suyas.

Estamos ante hechos sumamente lamentables en donde la justicia, una vez más y contra todo pronóstico, sigue siendo utilizada como brazo opresor en contra de quienes piensan distinto al Gobierno.

Desde el Senado, seguiremos insistiendo para que el Fiscal General de la República, comparezca ante el pleno de la cámara, con el fin de evitar que se consume un hecho que sería absolutamente vergonzoso para el país, e injusto para la comunidad académica y científica.

Migrantes en México

Grave es la situación que vivió nuestro país la semana pasada, al ser testigos de que cientos migrantes, principalmente provenientes de Haití, crearon un campamento improvisado debajo del puente que une a México con los Estados Unidos.

No hay una estrategia para prevenir que estos sucesos ocurran, ni mucho menos una política migratoria que respete los derechos de los migrantes, y que a su vez, cumpla con hacer respetar las leyes migratorias en nuestro país.

Durante este sexenio hemos sido testigos de diversas crisis migratorias en las que el Gobierno federal se ha visto rebasado. Con claridad puedo decirle, estimado lector, que ese es el resultado de la falta de visión y estrategia en el gobierno de la 4T.

Mientras no se cambie el rumbo, la situación migratoria en México, no mejorará. Agradezco el favor de su lectura.