/ miércoles 4 de mayo de 2022

Visión Empresarial | La salud de nuestra niñez es primero

A inicios del presente año 2022, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomendó administrar a menores entre 5 y 11 años la vacuna contra el COVID-19 de Pfizer-BioNTech; la única advertencia que realizó fue que la dosis a aplicar fuera de 10 microgramos en lugar de los 30 que se inocula a los mayores de 12 años.

Nuestro país está llegando tarde y de forma incompleta a la cita con nuestra niñez, pues apenas el jueves 28 de abril cuando se abrió el registro para vacunar a mayores de 12 años, esto es meses después de la grave ola provocada por la variante Ómicron.

Según un comunicado firmado por más de una decena de organizaciones, encabezadas por la Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim), hasta el 30 de enero pasado, las autoridades de salud han reportado 295 mil 233 contagios, 12 mil 977 hospitalizaciones, 971 intubaciones y mil 88 defunciones en el rango de edad de 0 a 17 años debido al Covid-19. Sin duda, un muy doloroso saldo.

Ciertamente con el Plan Nacional de Vacunación, 85.7 millones de personas ya cuentan con al menos una dosis, pero aún existe un porcentaje considerable de la población que no tiene el esquema completo. Únicamente el 61 por ciento de la población cuenta con la protección completa de vacunación.

Asimismo, existe un retraso en otros grupos de edad que la requerían. No se ha incluido a la población de 5 a 12 años y el registro para inmunizar a los menores de edad entre 12 y 18 años apenas se abrió, mientras que en la mayoría de los países de América Latina y Europa ya se contempla este segmento.

En México, únicamente se ha aplicado la vacuna Pfizer-BioNTech en adolescentes de 15 a 17 años, y en menores de 12 a 15 años que tengan factores de riesgo. El resto de la población infantil ha tenido que viajar a otro país o recurrir a los amparos para que se les garantice el derecho a la protección de la salud pese a que la vacuna ya se encuentra autorizada por la COFEPRIS tanto para la población infantil como para los adolescentes.

En Estados Unidos, Canadá, Colombia, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana y Uruguay empezaron a vacunar a niños a partir de los 12 años desde hace tiempo. Alemania, España, Portugal, Dinamarca y Francia ya han vacunado a la mayoría de su población de esa edad con al menos una dosis. Argentina, Cuba y Chile vacunan desde los 3 años de edad.

De igual manera existen casos donde en centros de salud es imposible encontrar vacunas contra tétanos, sarampión-rubéola y hepatitis B, o BCG (contra la tuberculosis) que se aplica a los recién nacidos. Se ha hecho patente la escasez de vacunas no solo antiCovid-19, la cobertura de vacunación del cuadro básico muestra una tendencia descendente desde el año 2018, lo que ha tenido un impacto negativo entre la población infantil; esto representa un retroceso en la progresividad de sus derechos.

El desabasto se da en un contexto de nuevas reglas de compras y distribución de medicamentos, a la par de transformar el Seguro Popular en el INSABI, y ahora no queda claro qué ocurrirá al migrar el INSABI al IMSS-Bienestar. Por la falta de una elemental estrategia para reemplazar a tiempo el suministro de fármacos y la añadida escasez de materias primas a nivel mundial, el resultado ha sido un catastrófico desabasto.

En el sector patronal queremos que los niños estén al centro de la toma de decisiones tanto en materia de salud como educativa. Lo gobiernos (federal y local) deben garantizar vacunas y medicamentos para toda la población infantil, no deben escatimar recursos para salvar vidas, tienen la obligación de observar el principio constitucional del interés superior de la niñez y los derechos reconocidos para las niñas, niños y adolescentes mexicanos.

Hacemos un llamado para que el Estado cumpla con la obligación de proteger la salud de las niñas, niños y adolescentes. Sólo con salud y educación de calidad serán felices, sólo así tendrán un futuro próspero.

  • * Presidente de la COPARMEX Tlaxcala.

A inicios del presente año 2022, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomendó administrar a menores entre 5 y 11 años la vacuna contra el COVID-19 de Pfizer-BioNTech; la única advertencia que realizó fue que la dosis a aplicar fuera de 10 microgramos en lugar de los 30 que se inocula a los mayores de 12 años.

Nuestro país está llegando tarde y de forma incompleta a la cita con nuestra niñez, pues apenas el jueves 28 de abril cuando se abrió el registro para vacunar a mayores de 12 años, esto es meses después de la grave ola provocada por la variante Ómicron.

Según un comunicado firmado por más de una decena de organizaciones, encabezadas por la Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim), hasta el 30 de enero pasado, las autoridades de salud han reportado 295 mil 233 contagios, 12 mil 977 hospitalizaciones, 971 intubaciones y mil 88 defunciones en el rango de edad de 0 a 17 años debido al Covid-19. Sin duda, un muy doloroso saldo.

Ciertamente con el Plan Nacional de Vacunación, 85.7 millones de personas ya cuentan con al menos una dosis, pero aún existe un porcentaje considerable de la población que no tiene el esquema completo. Únicamente el 61 por ciento de la población cuenta con la protección completa de vacunación.

Asimismo, existe un retraso en otros grupos de edad que la requerían. No se ha incluido a la población de 5 a 12 años y el registro para inmunizar a los menores de edad entre 12 y 18 años apenas se abrió, mientras que en la mayoría de los países de América Latina y Europa ya se contempla este segmento.

En México, únicamente se ha aplicado la vacuna Pfizer-BioNTech en adolescentes de 15 a 17 años, y en menores de 12 a 15 años que tengan factores de riesgo. El resto de la población infantil ha tenido que viajar a otro país o recurrir a los amparos para que se les garantice el derecho a la protección de la salud pese a que la vacuna ya se encuentra autorizada por la COFEPRIS tanto para la población infantil como para los adolescentes.

En Estados Unidos, Canadá, Colombia, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana y Uruguay empezaron a vacunar a niños a partir de los 12 años desde hace tiempo. Alemania, España, Portugal, Dinamarca y Francia ya han vacunado a la mayoría de su población de esa edad con al menos una dosis. Argentina, Cuba y Chile vacunan desde los 3 años de edad.

De igual manera existen casos donde en centros de salud es imposible encontrar vacunas contra tétanos, sarampión-rubéola y hepatitis B, o BCG (contra la tuberculosis) que se aplica a los recién nacidos. Se ha hecho patente la escasez de vacunas no solo antiCovid-19, la cobertura de vacunación del cuadro básico muestra una tendencia descendente desde el año 2018, lo que ha tenido un impacto negativo entre la población infantil; esto representa un retroceso en la progresividad de sus derechos.

El desabasto se da en un contexto de nuevas reglas de compras y distribución de medicamentos, a la par de transformar el Seguro Popular en el INSABI, y ahora no queda claro qué ocurrirá al migrar el INSABI al IMSS-Bienestar. Por la falta de una elemental estrategia para reemplazar a tiempo el suministro de fármacos y la añadida escasez de materias primas a nivel mundial, el resultado ha sido un catastrófico desabasto.

En el sector patronal queremos que los niños estén al centro de la toma de decisiones tanto en materia de salud como educativa. Lo gobiernos (federal y local) deben garantizar vacunas y medicamentos para toda la población infantil, no deben escatimar recursos para salvar vidas, tienen la obligación de observar el principio constitucional del interés superior de la niñez y los derechos reconocidos para las niñas, niños y adolescentes mexicanos.

Hacemos un llamado para que el Estado cumpla con la obligación de proteger la salud de las niñas, niños y adolescentes. Sólo con salud y educación de calidad serán felices, sólo así tendrán un futuro próspero.

  • * Presidente de la COPARMEX Tlaxcala.