Una máscara de huehue y una guitarra eléctrica son sus principales herramientas para obtener el sustento en las calles de Tlaxcala, pero el talento que demuestra en la improvisación musical ha sido clave para ganarse la atención y el aplauso del público.
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El “huehue de la guitarra”, como se hace llamar este músico callejero, mantiene en secreto su nombre de pila, sin embargo, el reconocimiento a su personaje es cada día más extenso.
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En charla con este Diario, el joven de 29 años compartió que su personaje nació ante la inquietud de reinterpretar la cultura de su natal Totolac: aunque no bailo, amo lo que representa el huehue y la tradición del carnaval. Pero creo que no debemos dejar la cultura en lo etéreo porque después se vuelve difícil volver a conectar con ella.
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Este músico comenzó a tocar en las calles durante la pandemia de Covid-19 para luego dedicarse a su oficio actual: la carpintería. No obstante, la pasión artística lo llevó de vuelta por el camino musical desde hace un par de meses con una nueva propuesta, que comparte los fines de semana en el zócalo capitalino cuando cae la noche.
Comencé tocando flamenco, pero ahora hago improvisación porque considero que la música es algo fugaz y a las personas les gusta porque se identifican con eso, aseguró.
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El personaje del “huehue de la guitarra” ha viajado a Oaxaca y Querétaro donde, según narra, también ha tenido buena aceptación: siempre llama mucho la atención la escena callejera. Hay mucha gente creativa en todos lados, agregó.
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La improvisación de este joven tlaxcalteca es lo que se disfruta al verlo en la calle con acordes que van desde el blues hasta el rock, pero profesionalmente está trabajando en su primer disco de estudio, el cual tendrá como sello la gratitud hacia las personas que han apoyado su carrera con alguna moneda y distribuirá en los próximos meses.