En el conflicto de límites territoriales entre Chiautempan y Tlaltelulco una sola cosa ha quedado clara: los alcaldes Héctor Domínguez y Rubén Pluma están muy limitados.
Si no es así, entonces cómo interpretar sus marchas, bloqueos carreteros, ofensas a los diputados lanzadas en el Congreso del Estado y porras que encabezaron hace unos días.
Ambos creen que están en un concurso de belleza en los que la porra más grande será la ganadora, dejando de lado que el tema debe dirimirse en el terreno de la legalidad. El conflicto de límites territoriales entre ambas comunas revivió al iniciar a construir Héctor Domínguez un rastro para su negocio de carnicerías en un predio administrado por ejidatarios de Tlaltelulco. El resto de la historia es ampliamente conocido.
Más allá de las decisiones emitidas por la Suprema Corte en antaño, los yerros del INEGI y del INE al quitarle territorio a Chiautempan en su cartografía actual y otorgar credenciales de elector sin tomar en cuenta criterios limítrofes, ambos alcaldes debieron preguntar antes de movilizarse si la entidad cuenta con legislación en límites territoriales.
Y es que al no existir el marco jurídico, no hay forma de que la legislatura actual pueda hacer algo para resolver este conflicto de límites y los de otras comunas.
Lo único rescatable hasta el momento es que la diputada María Félix Pluma Flores, hija del alcalde de Tlaltelulco y representante popular del Distrito 9, con mayoría poblacional en Chiautempan, decidió abstenerse de participar en el proceso en un acto de congruencia para evitar cualquier conflicto de interés político, personal o familiar. Así como se observa, a esta novela le faltan varios capítulos y la promesa de ambos alcaldes para resolver los límites será incumplida, al igual que lo hicieron sus antecesores.
APROVECHADOS
No cabe duda que el interés tiene pies y hay quienes ni a la muerte respetan. Al menos así lo evidenciaron algunos suspirantes a la alcaldía chiautempense que sin ningún pudor usaron las celebraciones de Día de Muertos y la masiva concentración de personas en las principales calles de la ciudad sarapera para regalar dulces y hasta ofrecer baile gratis.
El director de Protección Civil, Israel Corona Pérez, llevó a su grupo musical a la explanada del Parque Hidalgo para darle “pan y circo al pueblo”; lo mismo hizo Abraham Fragoso, pupilo de la Red Joven que lidera Santiago Sesín Maldonado al regalar dulces junto con su agrupación de jóvenes que en una labor “altruista”, también retiraron basura y maleza del Panteón Municipal “El Carmen”.
El empresario de vinos y licores, Carlos Ahuactzi, también hizo lo propio y se puso a regalar dulces frente a su establecimiento ubicado frente a la presidencia municipal de Chiautempan, mientras que Olaf Floresolayo Hernández, hijo del exalcalde Francisco Flores Olayo, “Panchito” para los cuates, usó Facebook para transmitir en vivo con el único argumento, ajá, de fomentar las tradiciones chiautempenses.
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