/ viernes 4 de octubre de 2019

500 años: ¿Malinche o Matlalcueyetl?

Existen confusiones respecto a nombres autóctonos de América Precolombina, los que a través del tiempo han sido alterados, otros vocablos han sostenido su etimología, la que ahora aportan el significado acertado gracias a la reconstrucción de las lenguas, en este caso nos ocupa la conocida como náhuatl, que se habló en gran parte de la actual geografía mexicana y de Centroamérica.

Hoy nos ocuparemos del nombre una mujer que figuró en la intervención del encuentro de dos culturas, esencialmente la española y de hablantes del idioma náhuatl. Nos referimos al significado del nombre Malintsin, cuya etimología es malinalli: trenza o enredadera, posiblemente referida al Octavo Signo Astrológico igual a Uno Trenza. Así que el nombre Malinalli en diminutivo es con el agregado tsin, además de diminutivo también tiene significado reverencial, así que Malinalli en diminutivo se convierte en Malintsin. Terminación equivalente en tratamiento en español: de trenza, trencita. ¿De dónde se deriva Malinche? La historia dice que “este nombre es dado por los indígenas a Cortés por alusión a Malintsin”. En efecto, la gramática náhuatl indica que el sonido “e” al final de la palabra significa posesión o propiedad. La aplicación de este nombre es el indicado para señalar que Malintsin pertenecía (como mujer) a Cortés .

Ahora, en cuanto al nombre Matlalcueyetl, corresponde al único volcán extinto de Tlaxcala, y cuyo significado está compuesto por las etimologías: matlalli, que significa verde obscuro, verde fuere o azul, y cueitl: falda, “Falda azul”, ello debido a la forma del volcán, y el color se debe a una florecita silvestre de ese color que cubre la falda de pronunciada ladera.

Algunos escritores sin criterio histórico han señalado a Malintsin de traidora, entregada al servicio de extranjeros que han mancillado a etnias aborígenes de lo que ahora es México, sin embargo, su papel expuesto por la historia debe generar otra concepción de la actitud de la mujer que sirvió a otros pueblos a liberase del imperio Asteca, cuyo dirigente en esa época era Moctesuma, heredero de un gobierno que duró muchos años. La escuela pública debiera aportar páginas de la historia de la “conquista española”, y en cierta forma considerar cuál fue la vida de esta admirable mujer de la cultura nahuatlaca.

Según el historiador Bernal Díaz del Castillo, Malinalli era de un pueblo llamado Painallan y era hija de caciques, y al morir su padre, su madre se casó con otro cacique y tuvieron otro hijo, al que sus padres dejarían el mando y para ello eliminarían a la hija, por lo que determinaron regalarla a comerciantes y la entregaron a indígenas de Xicalango de noche, para que no fuese vista, y “corrieron la voz de que Malinalli había muerto”. Los mercaderes de Xicalango la entregaron a los de Tabasco y éstos a Cortés. De “visita Hernán Cortés a la Villa de Guazacualco (Coatzacoalcos), utilizando a Malinalli, quien dominaba varias lenguas, mandó reunir a pueblos circunvecinos y a su presencia de los caciques acudieron la madre y hermanastro de aquélla niña regalada hacía tanto, madre como hijo lloraban porque tuvieron miedo de ser muertos por la cacica Malinalli. “En esos momentos doña “Marina” ya bautizada, los “consoló y les dijo que no temieran, “que no hubiese miedo” y explicó: “que cuando la dieron a los de Xicalango no supieron lo que hacían y se los perdonaba”. Tanto a su madre (Marta) como a su medio hermano (Lázaro), “les obsequió joyas de oro y ropa y se regresaron a su pueblo”. Como se comprenderá con esta reseña, Malintsin, ahora doña Marina ya bautizada, gozó de mando por la importancia que anota el historiador: “Sin la intervención linguística de Malintsin no hubieran los españoles entender la lengua nahutlaca”.

Debe recordarse que en el México precolonbino existían muchos pueblos con su respectiva lengua y gobierno, en la época precortesiana hubo un gran “imperio”, el de Tenochtitlan, que tenía sometidas a otras naciones como a Tlaxcallan, por ello los tlaxcaltecas se unieron al extranjero para sacudirse de esa presión imperial de varios años, así que la coalición está plenamente justificada.

*Se utilizó la Gramática de la Academia del Idioma Náhuatl.

Existen confusiones respecto a nombres autóctonos de América Precolombina, los que a través del tiempo han sido alterados, otros vocablos han sostenido su etimología, la que ahora aportan el significado acertado gracias a la reconstrucción de las lenguas, en este caso nos ocupa la conocida como náhuatl, que se habló en gran parte de la actual geografía mexicana y de Centroamérica.

Hoy nos ocuparemos del nombre una mujer que figuró en la intervención del encuentro de dos culturas, esencialmente la española y de hablantes del idioma náhuatl. Nos referimos al significado del nombre Malintsin, cuya etimología es malinalli: trenza o enredadera, posiblemente referida al Octavo Signo Astrológico igual a Uno Trenza. Así que el nombre Malinalli en diminutivo es con el agregado tsin, además de diminutivo también tiene significado reverencial, así que Malinalli en diminutivo se convierte en Malintsin. Terminación equivalente en tratamiento en español: de trenza, trencita. ¿De dónde se deriva Malinche? La historia dice que “este nombre es dado por los indígenas a Cortés por alusión a Malintsin”. En efecto, la gramática náhuatl indica que el sonido “e” al final de la palabra significa posesión o propiedad. La aplicación de este nombre es el indicado para señalar que Malintsin pertenecía (como mujer) a Cortés .

Ahora, en cuanto al nombre Matlalcueyetl, corresponde al único volcán extinto de Tlaxcala, y cuyo significado está compuesto por las etimologías: matlalli, que significa verde obscuro, verde fuere o azul, y cueitl: falda, “Falda azul”, ello debido a la forma del volcán, y el color se debe a una florecita silvestre de ese color que cubre la falda de pronunciada ladera.

Algunos escritores sin criterio histórico han señalado a Malintsin de traidora, entregada al servicio de extranjeros que han mancillado a etnias aborígenes de lo que ahora es México, sin embargo, su papel expuesto por la historia debe generar otra concepción de la actitud de la mujer que sirvió a otros pueblos a liberase del imperio Asteca, cuyo dirigente en esa época era Moctesuma, heredero de un gobierno que duró muchos años. La escuela pública debiera aportar páginas de la historia de la “conquista española”, y en cierta forma considerar cuál fue la vida de esta admirable mujer de la cultura nahuatlaca.

Según el historiador Bernal Díaz del Castillo, Malinalli era de un pueblo llamado Painallan y era hija de caciques, y al morir su padre, su madre se casó con otro cacique y tuvieron otro hijo, al que sus padres dejarían el mando y para ello eliminarían a la hija, por lo que determinaron regalarla a comerciantes y la entregaron a indígenas de Xicalango de noche, para que no fuese vista, y “corrieron la voz de que Malinalli había muerto”. Los mercaderes de Xicalango la entregaron a los de Tabasco y éstos a Cortés. De “visita Hernán Cortés a la Villa de Guazacualco (Coatzacoalcos), utilizando a Malinalli, quien dominaba varias lenguas, mandó reunir a pueblos circunvecinos y a su presencia de los caciques acudieron la madre y hermanastro de aquélla niña regalada hacía tanto, madre como hijo lloraban porque tuvieron miedo de ser muertos por la cacica Malinalli. “En esos momentos doña “Marina” ya bautizada, los “consoló y les dijo que no temieran, “que no hubiese miedo” y explicó: “que cuando la dieron a los de Xicalango no supieron lo que hacían y se los perdonaba”. Tanto a su madre (Marta) como a su medio hermano (Lázaro), “les obsequió joyas de oro y ropa y se regresaron a su pueblo”. Como se comprenderá con esta reseña, Malintsin, ahora doña Marina ya bautizada, gozó de mando por la importancia que anota el historiador: “Sin la intervención linguística de Malintsin no hubieran los españoles entender la lengua nahutlaca”.

Debe recordarse que en el México precolonbino existían muchos pueblos con su respectiva lengua y gobierno, en la época precortesiana hubo un gran “imperio”, el de Tenochtitlan, que tenía sometidas a otras naciones como a Tlaxcallan, por ello los tlaxcaltecas se unieron al extranjero para sacudirse de esa presión imperial de varios años, así que la coalición está plenamente justificada.

*Se utilizó la Gramática de la Academia del Idioma Náhuatl.