En regiones frías de Tlaxcala, el cultivo de jitomate con sistemas de invernadero se ha convertido en una alternativa de trabajo para los hombres del campo. Como las bajas temperaturas no son aptas para el desarrollo de este producto culinario e infaltable en la cocina tlaxcalteca (requiere de 25 grados centígrados), los plásticos guardan calor durante la noche y la verdura se desarrolla.
En Tlaxcala, desde hace 20 años comenzó el uso de invernaderos y riego por goteo en varios municipios. Los productores fueron impulsados a través del extinto Programa de Alianza para el Campo.
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Los gobiernos federal y estatal aportaban el 50 % y los productores el resto de la inversión a fin de instalar las naves, adquirir la plántula y establecerla.
Los hombres del campo fueron capacitados en la tecnificación del cultivo, pero siempre se enfrentaron a problemas de comercialización.
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Y la falta de canales de comercio los llevó a la quiebra, aunque otros permanecen activos en Huamantla, Huatzinco, Tepeyanco, Teacalco, Tetlatlahuca, Nativitas y Tlaxco.
TRISTEZAS Y ALEGRÍAS DA EL CAMPO
Al respecto, Jesús Franquiz García, productor de jitomate originario de Tlaxco, afirmó que en 12 años de trabajo, ha vivido en el campo tristezas y alegrías, toda vez que no siempre tienen apoyos institucionales ni de la familia.
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Rememoró que en 2010 instaló un módulo de mil metros cuadrados con auspicio del 50 % para la instalación de una nave de mil metros cuadrados de la entonces Secretaría de Fomento Agropecuario.
“Tiene dinero en la bolsa el campesino que trabaja la tierra con pasión y amor, entre el frío y el calor, en mi caso tengo seis hijos, pero a ninguno le gusta sembrar, yo sigo en el campo ya más de una década”, externó el ejidatario de 69 años.
Expuso que en la actividad agrícola se tiene de todo, “unas veces con buena producción, porque no le afecta el cambio climático y, otras veces, cuando el precio en el mercado es bajo”, externó.
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Refirió que durante este lapso, la labor de la plantación de jitomate ya tiene logros, como la instalación de otra nave (invernadero) de dos mil metros cuadrados.
“Siembro cebolla y calabaza, pero el jitomate tiene mejor costo en el mercado, en julio de este año no convenía, estaba en cuatro pesos, pero ahora, se compuso, lo están pagando en nueve mil pesos la tonelada”, resaltó
“Hemos dado la vuelta a la inversión, tenemos una nave más, en este año se puso muy caro el fertilizante granulado”, externó. Dijo que recibe un subsidio de Apoyos para la Producción del Bienestar porque como ejidatario dispone una hectárea y media en el ejido Payuca, del municipio de Tlaxco.
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“Sembré avena, porque no hubo lluvias a tiempo, aquí el campo da tristeza y alegría, imploramos a Dios por cada ciclo de temporal, al final, viene la cosecha en la nueva nave donde fueron invertidos 700 mil pesos”.
SIEMBRAS EN MARZO, COSECHAS EN JULIO
Don Jesús Franquiz subrayó que no se quejan de lo que Dios les manda cada año y explicó que, durante el mes de marzo, cuando las heladas han disminuido, trasplantan la variedad Óptima y cuyo nombre común es Huaje.
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“Aquí son constantes las heladas y sequías; en cielo abierto se pierden las cosechas, pero con invernaderos hay producción”, señaló Jesús Franquiz.
Refirió que durante este tiempo ha conocido con exactitud la producción y oferta en el mercado y destacó que después de 120 días de establecer las plántulas, viene la oferta y la venta.
A NUEVE MIL PESOS LA TONELADA
El productor informó que de julio a noviembre de cada año tiene lugar la cosecha de jitomate que es comerciado en la Central de Abasto de Puebla.
“Estamos en el arrastre, está por terminar la cosecha, los intermediarios vienen hasta los invernaderos, no hay queja nos fue bien en el precio, unas 35 toneladas fueron comerciadas entre cuatro y nueve mil pesos la tonelada”, mencionó.
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COSECHA
Jesús Franquiz informó que de julio a noviembre de cada año tiene lugar la cosecha de jitomate que es comerciado en la Central de Abasto de Puebla.
Los hombres del campo fueron capacitados en la tecnificación del cultivo, pero siempre enfrentaron a problemas de comercialización.
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