/ jueves 15 de julio de 2021

Deshojando el Cempasúchil | ¿Todavía no entendemos el daño que estamos haciéndole al planeta?

Me gustaría hacer una reflexión acerca de lo que está pasando en el planeta, de lo que le estamos causando al globo terráqueo, y de la forma tan desprolija que hemos manejado los recursos proporcionados por la Naturaleza, por ejemplo, cuando veo las cantidades escalofriantes de agua que inundan calles y avenidas de pequeñas y grandes ciudades que se pierden en desagües y barrancas, y después me informo que a las presas llegan apenas una mínima parte ya que actualmente varias de las mayores llegan apenas al 30 % de su capacidad, me pregunto ¿cómo es que no nos hemos preocupado por recolectar esa agua que nos permitirá vivir sin restricciones graves en época de sequía?, nos catalogan de país tercermundista y economía en crecimiento, pero… ¿cómo explicarse los terribles incendios en el vecino país del norte que barre con miles de hectáreas de bosques? y cada vez que se destruyen árboles se afecta terriblemente el medio ambiente.

Por ahora estamos ocupados –no sé si preocupados por la pandemia, a pesar de la tercera ola, los países han abierto negocios y espectáculos, quizá con la idea de que tendremos que aprender a vivir con ella, y de reactivar la economía, muchos que ya se vacunaron se sienten inmunes, sin embargo también hay muchos, por ejemplo en Chiapas, que se niegan a vacunarse, pero los hondureños llegan pos cientos a conseguir una vacuna, En varios países europeos ya llegó una nueva variante, que está golpeando a los jóvenes y ellos, no salen de discotecas, antros y quieren divertirse.

No nos queda duda de que somos un grupo de suicidas y que además no tenemos conciencia de grupo, no entendemos que formamos parte de una sociedad global, y lo peor no entendemos que estamos interconectados, y mientras unos pocos especulan, usan y abusan de las oportunidades para enriquecerse, hemos dejado crecer a la humanidad excesivamente, nunca nos planteamos la posibilidad a pesar de los conocimientos vertidos por científicos, de que el mundo sólo era suficiente para cinco mil millones de habitantes y ahora somos siete mil doscientos millones de habitantes, han muerto muchos, pero insuficientes, tendríamos que desaparecer dos mil millones para que el planeta recuperara su equilibrio, y esta plaga apenas lleva 4 millones de decesos, y muchos de los que están muriendo no es por la plaga, ya que hay millones muriendo de hambre.

SEMBRANDO VIDA ¡CUMPLE SU FUNCIÓN!

Definitivamente es uno de los programas fallidos de la 4T –uno de tantos – ya que la gente por ambición, y con tal de recibir lo que les da el gobierno federal por “sembrar vida” han deforestado grandes bosques y sembrado arbolitos, disque frutales que ni siquiera son endémicos del área, por lo cual tienen pocas posibilidades de sobrevivir y lo único que están haciendo es que los descuiden, dejan que se sequen y vuelven a sembrar, para ese tipo de programas primero sería necesario crear conciencia y conocer el real beneficio, a propósito yo aconsejaría a las nuevas autoridades que no dejaran pasar visitantes a la Malinche, el 90 % de los incendios son provocados por el hombre por descuido o adrede, la montaña tiene una vocación específica que es la de regular el clima de la región, en ella existen arboles endémicos de la zona, sin embargo por intereses económicos muchos que se sienten dueños, hacen –por ignorancia-, experimentos o tratan de apropiarse para cosechas alternativas, para conseguir recursos o para construir, lo cual es totalmente es inadecuado, yo sé que estamos creciendo, que cada día somos más, ¿no sería necesario crear conciencia en que como está el planeta no es viable tener varios hijos, que no tendrán las condiciones adecuadas, para salir delante de manera adecuada?

Y esos hijos de padres sin recursos aumentan la desigualdades, difícilmente alguno de ellos podrá salir de su estrato económico y social, y quien fomenta ese tipo de situaciones, fomenta las desigualdades, de por sí, la llegada de este gobierno y la pandemia produjeron más de 12 millones de nuevos pobres, está comprobado que el 97 % de las personas no consiguen superar su estrato económico, social y especialmente educativo.

En fin, pensemos más en el futuro de este planeta que no es nuestro, nos lo tienen prestado nuestros hijos. Y dejemos de pensar en el aquí y el ahora y en el $$$$$$; claro que todos deseamos estar cómodos y difícilmente nos negamos a recibir algo que nos regalen, pero ¿estamos conscientes del daño que le estamos haciendo al planeta?

DE DULCE, DE CHILE Y DE MANTECA

La situación en Cuba está que arde, la verdad que el control que llegó a tener Fidel Castro y en menor medida su hermano Raúl, no tiene que ver con el actual presidente, yo sé que cada país es independiente y autónomo, pero la comunidad global, debería estar atenta a las injusticias, catástrofes y excesos de algunos gobiernos, no necesariamente se trataría de intervenir en asuntos internos, pero si en tener la posibilidad de auxiliar a los pueblos que están en situaciones paupérrimas, quizá si pudieran ayudar a tiempo no llegaríamos a los extremos que estamos viviendo.

Espero que esta experiencia de la pandemia, nos esté dejando una lección, aunque… se ha demostrado que el que tiene más saliva come más pinole, y no decimos que sea malo ver los suyos primero, sino que hay que tratar de ayudar a los más indefensos y desprotegidos, Cuba, Haití, Venezuela y otros países latinoamericanos, están sufriendo las consecuencias de la reacción de clases sociales, tradicionalmente explotadas que se hartaron y cambiaron de régimen, sin pensar que caerían en situaciones peores, jamás imaginadas; lo que sucede es que en muchas ocasiones por el endiosamiento con algún líder, permiten cosas que están llevando a sus países, a tocar fondo, en años recientes hemos llegado a ver situaciones inimaginables de abandono, miseria y explotación que llegan de manos de esos líderes maravillosos que le iban a salvar, y ¿qué pasó? Decidieron perpetuarse en el poder y han esclavizado a sus pueblos y los han sumido en la miseria ¿cómo lograr un equilibrio entre lo necesario y lo justo? Cada persona, cada país, tendrá una respuesta distinta.

Lo que es verdad es que un pueblo educado funciona mejor, y la pandemia, nos vino a dar tremendo empujón hacia el retroceso más absoluto…en fin. ¡Veremos y diremos!